𝐇𝐀𝐑𝐑𝐘 𝐏𝐎𝐓𝐓𝐄𝐑 𝐏𝐑𝐄𝐅𝐄𝐑𝐄𝐍𝐂𝐄𝐒

-James Potter 01

Ya habían pasado varias semanas desde que comenzaste a recibir aquellos mensajes extraños. Cada dos días aproximadamente te llegaban unos pergaminos enrollados con una pequeña carta escrita en el. No tenías ni idea de quien te las podría estar mandando ni tampoco el motivo. Según él o la autora de la carta, era por que le gustabas. Siempre te sorprendías cuando llegaba una nueva y leías el contenido de esta. Tenía palabras muy bonitas y se notaba que la persona había puesto esfuerzo en escribirla, pero sin embargo seguías confundida de por que razones te mandaban esas cartas a vos.

Una mañana te despertaste como siempre dispuesta a ir al Gran Salón a desayunar. Bajaste junto con una de tus amigas y fuiste a sentarte en la mesa de tu casa correspondiente, Slytherin. Un pedazo de papel que se encontraba allí llamó tu atención. Tomaste el pergamino en tus manos y lo abriste para poder leer el contenido que ocultaba. Como todas las demás cartas correspondían al mismo autor; J.P. Pero esta vez el mensaje era diferente y mucho más corto de lo normal.

T/N

Te veo frente al Lago Negro luego de la última clase del día. Espero que vayas ya que estoy ansiando demasiado poder verte y confesarme en persona.

J.P

El resto del día te lo pasaste nerviosa y esperando a que el momento llegara. No pudiste concentrarte mucho en clases ya que tus pensamientos estaban en la misteriosa persona que era autora de aquellas cartas. Cuando finalmente todas tus clases se acabaron saliste apresuradamente del castillo para comenzar a ir al lugar donde te habían citado. Mientras te estabas dirigiendo allí un montón de dudas comenzaron a invadir tus pensamientos. ¿Qué si todo era una broma? ¿Qué pasaría si en verdad solo era alguien que se divertía a costa tuya? ¿O qué tal si te dejaban plantada? Sacudiste tu cabeza alejando todos esos pensamientos negativos. No podía ser que una persona se tomara el tiempo en escribir todas esas cartas solo para molestarte. Suspiraste y apuraste el paso hasta llegar al lugar citado. Te sentaste en una gran roca que había allí para esperar. No había nadie y solo se oía el sonido de la suave brisa chocar contra las hojas de los árboles. Ya habían pasado varios minutos cuando comenzaste a pensar en que tal vez si te dejarían plantada o solo querrían reírse de vos. Estabas por levantarte de tu lugar cuando oíste una voz agitada a tus espaldas.

-Siento... la... demora... Me castigaron... por mi... "insolencia". Puf, como digan.

Sentiste como quedabas congelada al oír la voz de aquel muchacho. Lentamente giraste hasta poder ver a un James Potter agitado y con sus manos apoyadas en sus rodillas, tomando aire ya que al parecer había corrido. Entre tantas personas jamás te hubieras esperado encontrarte con el chico que era odiado por la mayoría de tus compañeros de casa. Te levantaste de donde estabas sentada y lo miraste con una mueca de confusión.

-Esto es una broma, ¿verdad? -preguntaste mirándolo sin entender.

James soltó una risa que te hizo sentir nerviosa.

-¿Broma? ¿Por que tendría que estar bromeando?

Mordiste tu labio inferior nerviosa y bajaste la vista. James siempre se había encargado de gastarte bromas y molestarte, no entendías por que de la nada había comenzado a escribirte cartas diciéndote cosas tan lindas. De verdad estabas pensando que esta era otras de sus bromas pesadas.

-No es una broma, en verdad que no lo es -pareció leer tus pensamientos- Se que es extraño y muy repentino, pero todo lo que escribí en esas cartas es verdad. Me gustas y tenía miedo de decirlo en voz alta ya que no sabía como ibas a reaccionar. Por eso siempre estoy molestandote y lamento si alguna vez provoqué que te sintieras mal.

James se acercó más a ti y tomó tus manos. Lo miraste directo a los ojos y te sorprendió ver la sinceridad en ellos. Tal vez no estuviera mintiendo, ya resultaba difícil que quisiera mantener una broma así.

-Entonces... ¿aceptarías salir conmigo?

Lo miraste por unos instantes en silencio, pensándolo. Finalmente luego de unos segundos que a James le parecieron eternos, terminaste aceptando.