El drama empezó, él dijo que sí eran novios, que Jane era una zorra, me echó en cara todo eso, según Zev; creía que eramos amigos, pero no lo eramos, él solo me hablaba para saber dónde diablos estaba mi prima, nunca fue una persona de querer acercarse a mí, ni porque era primo de Jane, y para mí eso estaba más que perfecto. Yo tampoco quería ser su amigo, sin embargo, con el único que pude tener una conexión estable fue con Neisan, su mejor amigo. Era un gran chico.

Ahora, Zev vivía con ese resentimiento hacia los primos Howland por verle la cara de imbécil, según él, Neisan me había dicho que solo se sentía traicionado y decepcionado, pero ambos sabíamos que la relación de ellos era tan rara... y yo no tenía nada que ver, aunque a pesar de todo esto, no podía dejar a Jane, ella era mi prima y la quería demasiado aún fuera demasiado perra, por lo cual, la defendí. Era tan estúpido que me odiara por un asunto que fue y era de ellos dos. ¿Yo qué?

Jane rodó los ojos acompañado de una risa, yo busqué la mirada de mi prima para reprenderla.

—Dile que están por los estantes de las salsas— murmuré esperando a que ella se fuera, pero no lo hizo —. Vete, Jane.

—¿Por qué? No estoy haciendo nada, sólo estoy saludando. Se llama educación.

—Se llama no tener vergüenza después de actuar como...

—Hey, detente— alcé mi voz y lo miré con enojo—. No te metas con ella. 

—Zev, cálmate— Neisan lo regañó.            

—¿Sí?— el ruloso alzó una ceja y rió amargamente—. Ya entendí porqué estás a la defensiva. Hoy es 2 de julio.

—Mira imbécil, más vale que te calle, no tienes ni un derecho de decir nada al respecto— Jane elevó la voz, estaba enojada y sus ojos azules se oscurecieron, yo me quedé callado sin decir nada, no tenía ganas de hablar.

Cogí los boletos para arrastrarlos por el mostrador, murmuré el precio, pero no me pagó. Se quedó viendo los boletos y enarcó una ceja.

—No quería la función para esta hora— indicó.

—Zev...— otro de sus amigos dijo.

—No me dijiste, supuse que era para ahorita, total, faltan quince minutos para que empiece— agregué.

—Pero no quiero esta hora— insistió.

Y me enojé. Había cruzado la maldita línea y me temperamento estaba rebasado. Maldito idiota.

Me incliné sobre el mostrador y lo miré con detenimiento a los ojos, mis labios en una fina línea y mi mandíbula tensa, apretando mis maxilares con furia, sintiendo como todo mi cuerpo se tensaba y mis ganas de golpearlo aumentaban.

—Si tanto quieres quejarte, puedes hablar con el gerente para que le diga a dueño— sentencié —, pero eso en vano, porque sabemos que el gerente sólo es otro trabajador para el dueño, es decir, mi papá. Vamos, ve a quejarte como el hijo del dueño es un mal educado... y si no te gusta este maldito cine, puedes ir a otros, total, hay como diez. Ahora lárgate que necesito atender a gente que sí vale la pena.

—Luke...— Jane intentó hablar, pero no la dejé. 

Cerré con fuerza la caja registradora y la miré con furia.

—¡Wilson, ven para acá!— llamé. El chico se acercó y proseguí —. Que el rizado te pague los 4 boletos, quédate a cargo.

Él asintió y, sin más, tomé del brazo a Jane y me adentré al cuarto del personal hasta el fondo para que nadie pudiera escuchar, o al menos no los clientes. Ella me miraba neutra, no me tenía miedo. Jamás le había dado miedo.

ANTES DE ELLA © #3  [✔] Nueva versión próximamente en físico.Where stories live. Discover now