Dulce Debilidad © Libro 1 [✓]

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Stefan suelta una risa demasiado exagerada y, entonces, me mira con una ceja alzada.

— Define atractivo, Giselle. Chase es la criatura más fea sobre la faz de la tierra. Es asqueroso, y fastidioso...

— Eres su hermano...

— Es mi deber avergonzarlo delante de su noviecita.

— Y aún así se quieren — juego a lo que Stefan ríe.

— No puedo vivir sin él — admite, y sus palabras me parecen increíblemente adorables.

No sé qué decir a eso así que nos volvemos a quedar en silencio mientras seguimos haciendo nuestra tarea, uno junto al otro.

— Chase me habla mucho de ti — suelta de la nada, llamando mi atención.

— ¿Ah, sí? — No puedo evitar sonar alegre.

Stefan asiente.

— El idiota me tiene harto, ¿sabes? Siempre es: Giselle esto, Giselle lo otro... Es irritante.

Una pequeña sonrisa se desliza por mis labios ante sus palabras.

— Claro que no lo es, me parece algo muy adorable.

Stefan ríe de manera breve.

— Giselle, de verdad, lo es. Desde que llegaste no para de hablar de ti, y yo estuve ahí para escucharlo decir cuanta cursilería barata se le cruzaba por la mente y ¡vaya que es cursi el hijo de puta! Y ni hablar cuando empezaron a salir de verdad ¡ese idiota llegó más feliz que nunca! Él te quiere... — las últimas palabras las susurra, y me da la impresión de que lo está diciendo más para él que para mí.

No puedo evitar sonreír un poco más, como idiota.

— Eso es lindo — admito.

— Si tú lo dices… — Stefan masculla — Me gustaría tener a alguien así como tú en mi vida.

— ¿Nunca has estado enamorado? — pregunto, sin poder creermelo.

Stefan suelta un pesado suspiro y niega con la cabeza.

— Amar es para idiotas. Eso de andar tras una chica y hacer locuras por ella no es para mí. Esas cosas se las dejo a Chase.

— Amar no es para idiotas...

— Amar te hace débil, Giselle — sentencia —. Amar es debilidad, y yo no estoy dispuesto a ser débil por una chica.

— ¡Claro que no! — Exclamo — Amar es un sentimiento de lo más lindo y…

— Y luego todo se va a la mierda — termina por mí —. El amor es peor que la droga. Esa mierda del amor te destruye.

Lo miro, sin poder creer lo que ha dicho. ¿Por qué habla de esta forma?

— ¿Por qué te empeñas en pensar que el amor es destrucción?

— ¿Quieres que te diga lo que yo opino, Giselle?

Lo miro, esperando escuchar su respuesta.

— El amor es una gran mentira. Es una simple fantasía que personas como tú, y como Chase, utilizan… ¿para qué? Realmente no lo sé. Lo único que tengo claro es que no es más que solo una ilusión. ¿Y sabes qué pasa cuando la ilusión se rompe? Llega la hora de enfrentarse a la realidad. Y es justo ahí cuando yo me pregunto: ¿vale la pena? Al final de cuentas, cuando eso que llaman "amor" se acaba, todos terminamos igual: siendo miserables, porque aquello que te hacía feliz y te hacía reír, ahora es eso que te hace llorar y sufrir. Yo creo que no vale la pena. Estoy mejor solo.