Capitulo 14. No de nuevo.

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Los rayos del sol se colaron por la ventana de la habitación de thsuki, estos llegaron al rostro del rubio y termino por despertarse, lo primero que vio al abrir los ojos fue a thsuki. Se sonrojo al recordar lo que había hecho en la noche, en especial por su inesperado comportamiento travieso.

La expresión de relajación de su peliazul lo relajo también, el cabello de thsuki brillaba al ser alcanzado por el sol, de su boca caía un poco de baba y Yuki no puedo evitar reír ante lo lindo que se veía su pareja.

Al rato thsuki también se despertó y al ver a Yuki contemplándolo le sonrió.

—Buenos días Yuki. Que tal dormiste?

—Regular... aun tengo sueño -Terminó esa frase bostezando.

—Era de esperarse, ayer lo hicimos hasta el amanecer. -Yuki no dijo nada, solo apartó la mirada de lo avergonzado que estaba. -Si aún tienes sueño lo mejor será que sigas durmiendo.

—No, estoy bien pero tengo hambre...

—Entonces vamos a la cocina, mi madre suele tener algunos snacks.

El peliazul alzó a Yuki, lo acomodó estilo koala y lo llevo hasta la cocina donde se encontraron a Irina preparado el desayuno mientras tarareaba una canción la cual estaba siendo escuchada atentamente por los gemelos. Estos al advertir la presencia de su hermano y su pareja se volvieron hacia ellos.

—Onii-Chan!! Por tu culpa ahora tenemos sueño. -Reprocharon los gemelos al unisono.
Thsuki notó que ambos tenían ojeras, no era muy marcadas, pero por ellas se podía deducir que anoche no pudieron dormir.

—¿Eh?? ¿Porque dicen que el culpable de que tengan sueño soy yo?

—Onii-chan eso es obvio, por la noche y la madrugada se escuchó por toda la casa los gemidos de ustedes dos! -Les
Regaño Suny, mientras Sany los señalaba de forma acusadora.

—Vaya y con lo inocentes que eran, pensaba que ustedes dos creerían que solo estábamos jugando.

—Pues vaya forma de "jugar" tan escandalosa y prolongada, no pudimos dormir hasta que en la madrugada cuando por fin dejaron de hacer ruido.

Thsuki no sabía si pedir disculpas o negar todo, pero en ese momento solo podía reír al ver a Yuki sonrojarse completamente.

—Bueno niños eso no importa, les preparé café, además lo más importante en este momento es... ¡Que voy a ser abuela!! Mi bebé volvió cuando ya no habían esperanzas, consiguió una adorable pareja y serán padres. Dejen de quejarse y festejemos! -Irina soltó toda la emoción contenida de ayer y los abrazo a todos.

Los gemelos estaban un poco avergonzados por el comportamiento de su madre, thsuki estaba feliz de estar de vuelta, pero comparado a Yuki... No tenía palabras para describir lo que sentía, nunca había tenido esta sensación de seguridad desde que conoció a thsuki, y en este momento se había incrementado drásticamente, solo pensaba en que había tenido mucha suerte de encontrar una familia, una verdadera familia que pudo ver a través de el fácilmente y no desconfiar ni por un segundo, y que a pesar del poco tiempo que se habían conocido ya compartían mucho cariño.
Estuvo a punto de llorar pero se contuvo.

Los gemelos querían separarse de ese abrazo pero Irina fue más ingeniosa, los mantenía envueltos en su cola y ellos no se podían mover. Al cabo de unos minutos —y mucho forcejeo— Irina cedió y los dejo libres a todos, pero la cara de emoción que tenía no se la quitaba nadie.

Después fueron a desayunar, platicaron y se pusieron al día con todos los sucesos mientras no estuvieron, todo transcurrió con normalidad hasta que se dieron cuenta que sakuya no había aparecido en todo ese tiempo, y como si la hubieran invocado ella apareció por la puerta.

¡¡NEKO PERVERTIDO!! (Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora