Olivia ➸ h.s

treinta y uno.

"Mi amor por ti es infinito"

Harry.

Miraba fijamente a Olivia, en sus ojos podía ver la expectación que tenía con respecto a que le contara la historia de la creación de la cancion que lleva por título su nombre.

— Nunca te había visto tan entusiasmada con algo – reí suavemente mientras tomaba su mano para luego entrelazarla con la mía.

— Siempre he tenido la duda con respecto al porque esa cancion – sonrió mostrándome sus dientes.

— Doctora Golden, usted debería estar durmiendo – le ordeno mientras sonrió.

— Y yo como doctora le ordeno a mis pacientes que me cuenten todo lo que les pido – sonrió triunfante, debo admitir que me gano.

— Está bien – me resigno, el contar la historia me da un poco de vergüenza – Tu ganaste.

— Siempre he sido yo quien termina ganando en esta relación – sonrió inocente.

— Ok, ahora sí – respire profundamente - ¿Recuerdas cuando hubo una vez que tuvimos una pelea fuerte? – le pregunte y ella asintió.

— No me gusto esa discusión, pensé que me ibas a dejar. – admitió.

— A mí tampoco – me sincero – Te contare esa historia para que vayamos entrelazándola con cada parte de la canción. – suspire – Ese día discutimos por los celos que nos teníamos mutuamente, tú con Caroline y yo con Freddy, bueno, esa vez recuerdo que este tipo había subido una foto contigo abrazándote mientras veían el atardecer en la playa, el punto es que en el momento que vi aquella fotografía, mis celos empezaron a fluir, con justa razón, el chico te estaba abrazando como solo yo te podía abrazar. Esa noche nos íbamos a juntar para salir a cenar, fuimos a la cena y tú me dijiste que me encontrabas raro y yo lo desmentía cada vez que me lo preguntabas, el punto es que al final de la cita explote y tú también, mencionaste que yo no podía ponerme celoso cuando era yo quien recibía mensajes provocadores por parte de Caroline, mensajes que nunca respondí, el punto es que empezamos a discutir en plena calle frente a tu casa, preferimos por el bien de ambos dejar la conversación hasta ese punto y cada uno se fue a su casa, enojados por supuesto y orgullosos, bueno al final nos terminamos reconciliando pero fueron las peores horas para ambos, tanto notorio fue nuestra pelea que tu madre y mi madre se llamaron para saber que había pasado entre ambos y si es que habíamos terminado – termine de contar – Ahí nació el primer verso del: ¿Recuerdas el día en que nos queríamos rendir, cuando tú me decías que yo no daba lo suficiente y todas tus amigas estaban diciendo que yo te iba a dejar?

— ¿Entonces por esa pelea fue que nació la cancion? – pregunto confundida.

— No – admito – El primer verso fue el inicio solamente de la cancion, el motivo del cual escribí esa cancion es completamente otro, pero lo sabrás más adelante, aunque el primer verso tiene que ver con la historia que te conté recién, esas fueron cambiadas de una manera que sonara mejor, las "amigas" eran nuestras madres. – reímos.

— Si nuestras madres se enteran de eso, estarían muy sentidas.

— Es mejor que este secreto quede entre nosotros – susurro y ella ríe, adoro su risa es como una armonía para mis oídos. – El segundo verso – empecé a contar. – Es la primera vez que hicimos el amor – ella me miro sorprendida – Sí, cuando tus padres fueron de viaje por una semana a Leicester a visitar a tus abuelos, yo fui a acompañarte toda la semana, dormimos juntos abrazados, y luego de ver The Notebook como décima vez en todo lo que llevábamos juntos, quisimos revivir una de las escenas y terminamos enredados entre las sabanas de tu cama, recuerdo cuando en la mañana siguiente llevaba el desayuno a tu cama y tú te encontrabas acostada con mi polera mientras veías televisión, te veías sexy y tierna a la vez, simplemente la mezcla perfecta. – la mire tiernamente y podía notar el brillo de sus ojos – Y así nació el segundo verso Ella está acostada en su cama, con mi camisa puesta pensando en todo lo que salió mal, Esta no es una mancha de vino tinto, estoy sangrando de amor.