Blue {Monkey .D. Luffy x Lectora} Finalizada

Armada revolucionaria

–Quiero que escuches una parte de la historia Coby – susurro (t/n) mirándole fijamente, sin lagrimas ni alguna expresión triste –. Eres uno de los marinos más importantes para mí, así que escucha y no lo cuentes a nadie si confías en mi: Yo formo parte de uno de los grandes misterios en la historia.

–¿Misterios...? – pregunto confundido –.

–Existe un tesoro enorme que fácilmente podría ser el One Piece, más no lo es. Es algo tan similar que te llevara al éxito inmediato, para encontrarlo necesitas una llave. La llave soy yo.

–¿La llave? Entonces... es por eso que estas aquí, no eres realmente un marino por cuenta propia... ellos, te usan... ¿Pero, por qué me cuentas esto a mí?

–Tal vez está sea la última vez en que nos veamos como aliados.

Guardado como un secreto, esa misma madrugada consiguió descubrir uno nuevo, pero ese fue descubierto por él y muchos más: Una habilidad oculta por parte de ella que consiguió brindarle la ayuda necesaria para que escapara en uno de los barcos enormes.

–¡No puedo ver nada, estoy ciego! – exclamaban muchos al unísono intentando desesperadamente poder ver los rayos del sol que se asomaban, no solo oscuridad –.

Otros gritaban desesperados como si estuvieran teniendo la peor pesadilla de sus vidas, y unos pocos se veían pasivos sin importar que una persona importante estuviera escapando. Arrojando su capa al mar con su apellido en está mantuvo un buen orden para huir, e incluso las personas que estaban en ese barco parecían apoyar a quien les traicionaba.

–¿Puede ser una Akuma no mi? – pregunto Helmepo confundido mientras miraba a los aun afectados, la mayoría comenzaba a despertar considerando la distancia que ella dejo –.

–¿Puede ser? – dijo Coby aun confundido –.

–Ella es fuerte pero no de una manera monstruosa, si tomamos en cuenta que su presencia aquí es un enorme misterio. Digamos que sí, porque de otra manera sería imposible.

Todos subiendo a los barcos en busca de seguirle el camino a la chica se apresuraron lo mejor posible sin tomar en cuenta el gran problema que les podía imponer. La mayoría acabo tomando rumbos diferentes, fue el mismo caso cuando ella paso por su lado robando el barco, incluso se preguntaron cómo consiguió escapar de la celda hasta que notaron su mayor error: Las cadenas que la sujetaban eran comunes.

Una vez que desembarco en el archipiélago Sabaody mantuvo un gran cuidado con los marinos capaz de decidir mandarlos de vuelta a Marine ford, aun conociendo el peligro que esto provocaría cuando no tuviera más el control en ellos y recibieran el mensaje sobre su escape. Recibió miles de miradas ante sus prendas rasgadas y impregnadas con sangre seca, e incluso parte del cuerpo de la misma vendado, antes de desembarcar se dio una buena ducha para quitarse toda la tierra que tenía encima, sabía que eso la haría verse demasiado sospechosa.

–Aquí hay una tienda de ropa... – susurro para sí misma contemplando la tienda que pintaba en buena señal –.

Haciéndose paso dentro de la tienda un hombre camino alegremente hasta ella dando la bienvenida y comportándose amable. Incluso dando miradas largas a las maltratadas prendas de vestir que la misma traía.

–¿Qué está buscando? ¿Quizá un estilo sensual, uno clásico, o tal vez uno elegante? – pregunto con todas las pizcas de interés sobre ella –.

–Algo que sea cómodo.

–¿Cómodo? ¡Entiendo, mira aquí tengo estás prendas, puedes probártelas si te parece bien!