Cómo Conquistar al estilo Kuroko No Basket |One-Shots|

#9

Estaba nervioso. Vaya que si. La ansiedad e impaciencia lo estaban consumiendo. Se levantó del sofá de la sala y fue al comedor. Dio unas vueltas a la mesa y se dirigió a la cocina. Abrió la alacena, el refrigerador y el congelador tres veces. Volvió sobre sus pasos y tomo asiento en el mismo sofá donde estaba hace unos minutos pero volvió a levantarse. Prendió el televisor y luego lo apago.

-Seis meses- decía mientras iba y venía en forma neurótica de una esquina a otra. Estaba desesperado. -Seis meses- se repetía.

Lo estaba matando. Lo necesitaba. Lo demandaba. No podía esperar más.

El último vaivén ansioso no pudo completarse con éxito.

Pasos cesaron frente a la puerta. El pomo hizo ruido y comenzó a girar.
La puerta se abrió de par en par devolviéndole la vida.

Dos cristales azul eléctrico, una amplia sonrisa en todo su esplendor y unos brazos abiertos a los que había añorado desde el momento de su partida hicieron su aparición.

Sin pensarlo dos veces unió su cuerpo con el de su pareja sin siquiera importarle que aún estuvieran en el pasillo.

Hundió su rostro en su cuello y aspiro su embriagante aroma. Él lo apresó entre sus brazos, lo levantó y lo hizo girar en el aire. 

Ambos rieron.

Se separaron unos centímetros. Lo suficiente para poder observarse. Se habían abrazado en sueños varías veces pero nada se compara a la realidad de tenerse piel con piel el uno al otro.

-Te extrañé.- Susurró el pelirrojo.

Sus frentes chocaban, sus respiraciones claramente agitadas se mezclaban entre si. Sus manos pasaban frenéticos por el cuerpo del otro sintiéndose más desesperados que nunca.

-Lo sé.- Gruñó en la boca del menor.

Acto seguido atacó sus labios enterrando cualquier frase que pudiese escapar.

Al diablo las formalidades. Lo necesitaba. Allí. Ahora.

El peliazul tomo el dominio de la situación con fiereza, utilizando toda la cordura que le quedaba para no hacérselo allí mismo. Lo arrastró dentro del apartamento y cerró la puerta de una patada.

El camino hasta la habitación se les hizo eterno. Incontenibles gemidos y guturales sonidos cesaban en la comisura de sus labios mientras destrozaban las detestables telas que se interponían entre sus cuerpos.

Cargados de lujuria y deseo cayeron pesados en la suave cama, confidente de sus más ardientes secretos. Uno sobre el otro saboreaban y disfrutaban con desesperación lo que habían estado esperando desde que se dijeron adiós en aquel aeropuerto.

-Eres mío otra vez.- Dijo el peliazul posándose sobre el menor frotando su cuerpo de manera tortuosa y lenta.

-Nunca deje de serlo.- Jadeó el pelirrojo tomando al moreno por las caderas de manera peligrosa, demandando menos charla y más acción.

Hola hola ¡wah! *le tiran algo*
Si, lo sé bebes. Esperaban más. Los conozco bola de pervertid@s 737. Les contaré lo que sucede.

Lo que pasa es que nunca nunca NUNCA escribí fundue. Y como que me da miedito que no me salga bien. Ya saben. Ni siquiera se si este OS está yendo (de buena manera) para ese camino. No se bebes, ¿Ustedes que dicen? Haré el esfuerzo por ustedes. Pos sin ustedes que sería yo 7w7. Si quieren el fondue háganmelo saber en los comentarios con el jachtac:

#SiAlFundue

Todo depende de ustedes.
Bueh, este OS va dedicado a WiLsOn_1406 Aqui está tu pedido <3 gracias por elogiar mi escritura de manera zenshual, ojalá álcense tus expectativas..

SPOILER ALERT
Luego del fondue (si se logra, depende de ustedes bbs) sigue un Akakuro que ya tengo en borrador y espero les guste.
Sin más que eso me despido.
Los quiere con todo el Kokoheart:

Charlie.