Dance&Love - Dancetale

Parte 3: Constancia

Pero tenía otro sueño, y esa era la razón por la que deseaba tanto esa cita. Sólo necesitaba un baile. Necesitaba encontrar a otro ser que la complementara en ritmo y que pudiera mezclar su estilo con el de ella. Quería conocer esa clase de conexión, que era capaz de mezclar los cuerpos y las almas de quienes bailaban, que a simple vista dejaba en claro que era algo único e inolvidable. Buscaba conocer el amor.

-¿a donde vas con tanta prisa niña? -Dijo una voz a su espalda.

Frisk se giró y volvió unos cuantos pasos sobre el pasto para encontrarse con quien la llamaba. ¿Ese puesto de descanso siempre estuvo ahí?

-¿Sans? - Dijo extrañada. - ¿Qué haces aquí? Pensé que estarías en Snowdin.

-oh, ya sabes, mucho tiempo y muchos lugares en los que puedo dormir. - Respondió el esqueleto guiñándole una cuenca.

-Jajaja, -Rió la chica. - bueno, yo iba a buscar a Papyrus.

-¿oh? ¿necesitas ayuda? - Preguntó con gran interés, o quizás fingido interés.

-Si... No puedo bailar con Undyne, su ritmo cambia mucho y no me puedo mover tan rápido como ella... - Respondió Frisk, tratando de hablarle con confianza al esqueleto, no estaba acostumbrada a contarle sus problemas a nadie.

-mmm... - Murmuró Sans mientras buscaba su botella de ketchup. - sé lo que necesitas, ven, tengo un atajo.

Sans tomó un sorbo de su bebida y le ofreció la otra mano a Frisk, quien sintió algo de incomodidad, pero tomó su mano mirando hacia otra dirección. Esperaba llegar a la casa decorada de Snowdin y encontrar a Papyrus alegre como siempre, listo para bailar con ella.

Con un leve mareo, sintió sus pies en una superficie distinta y al poner atención notó que ahora se encontraba en el club de baile de Gilbry's. ¿Por qué la había llevado a ese lugar? Ella no tenía permitido el ingreso, no formaba parte del club.

-no pongas esa cara, -Dijo Sans mientras tiraba de su mano para encaminarla. - es el mejor lugar para practicar lo que quieras, Gilbry siempre me presta su estudio cuando Papyrus quiere bailar sin público.

-Entonces... ¡¿Tú me vas a ayudar?! - Preguntó con sorpresa y emoción. El ser más misterioso, quien enseñó a bailar tan bien a Papyrus, y que prometió no bailar más, le estaba ofreciendo ayuda. No podía creer lo que estaba pasando.

-vi como bailabas con mi hermano, sé exactamente lo que te hace falta.

Sans le dio una palmaba en la espalda a su amigo Gilbry mientras pasaba por la zona restringida, éste le lanzó una botella de ketchup extra y le hizo una señal de aprobación con la mano a Frisk. Su comunicación sin palabras era muy amigable y al parecer Sans tenía todos los beneficios del club.

-bien, aquí tienes mucho espacio. - Dijo Sans mientras dejaba sus botellas de ketchups sobre la única mesa en el lugar.

El suelo era oscuro, muy liso, sus pies descalzos sentían su suavidad y podía imaginar el cuidado que le tenían a aquel lugar. El frio que transmitía la habitación recorrió su cuerpo y sus ojos recorrieron cada rincón del amplio escenario, impresionándose con la gran iluminación y con cada detalle decorado de aquel enorme teatro.

-Wooow. - Dijo Frisk sonriendo ampliamente.

-vamos, ponte tus Zapatillas de Ballet.

Frisk obedeció con emoción.

-¿Cómo vas a ayudarme a bailar si estás con pantuflas? - Cuestionó cuando estuvo lista.

-jajaja, - Rió Sans mientras se ponía la capucha. - no necesitas compañía para esto.