13. Un beso platónico

5.1K 716 138
                                    

El plan maligno se Bakugou prometía dar frutos. Si por plan maligno entendíamos arrinconar a Todoroki en el armario de la limpieza, claro. No es como si pretendiera violarlo o algo por el estilo, no, él era un romántico. Simplemente, requería de ayuda urgente y no se le había ocurrido nadie mejor que él para echarle una mano.

  -¿Se puede saber para qué me has traído aquí?

  -Te necesito.

  -¿A mí? Pero si siempre estás huyendo de mí, no me soportas.

  -Ya, bueno, pero ahora te necesito.

  -¿Y no podías buscarte a otro como, no sé, Kirishima?

  -Es que Kirishima es el problema.

  -Pues lo siento, pero no me interesa.

  -¿Qué clase de amigo eres?

  -Tú y yo no somos amigos.

  -Pero podríamos llegar a serlo.

Ah, la fibra sensible y de ansia social de Shouto.

  -Te escucho.

  -Kirishima no me deja en paz. Se me... Se me confesó hace unos días y se niega a aceptar un no por respuesta. Le he dicho que tengo pareja, sin embargo, no me cree y está empeñado en que tengamos una cita.

  -¿Y qué papel juego yo en todo esto?

  -Pues que debo hacerle creer que ya salgo con alguien, y pensaba que ese alguien podrías ser... tú.

  -¿Yo?

  -Tú.

  -¿Por qué yo? ¿No podías pedirle algo así a otro? ¿O a otra?

  -Bueno, le pedí consejo a Uraraka, y ella me aconsejó acudir a ti. Así que... ¿me ayudarás? Recuerda que nuestra amistad está en juego.

  -Vale, sí. ¿Qué tengo que hacer?

  -Besarme delante de Kirishima.

  -¿Estás de coña?

  -A mí tampoco me fascina la idea, pero estoy harto de él y, si provoco una explosión en su cara, me llevaré una buena bronca.

Todoroki aceptó a regañadientes. Quizá su afán por hacer nuevos amigos era demasiado fuerte. Claro que también existía la opción de que deseara besar a Katsuki, pero ¿qué posibilidad había de eso? Ninguna, por supuesto.

Al final, acordaron besarse en cuanto Eijiro los viese. De esa forma, el rubio sería capaz de evitar una cita indeseada con él. Por suerte o por desgracia, no tardaron en toparse con el causante de todo aquel lío. Shouto agarró a Katsuki por la nuca y lo atrajo hacia sí, devorando sus labios.

  -¿Ves? -Habló Bakugou-. Te dije que salía con alguien.

  -Ya... Sí... Esto... Mejor me voy.

  -Oye, termostato, ¿te gustaría quedar cuando acaben las clases?

  -Sí. Sí, podría estar bien, chico bomba. Sin embargo, que ni se te pase por la cabeza la idea de que volveré a besarte.

  -Ya veremos lo que dices en unas horas.

El reto de los besos [BakuTodo]Where stories live. Discover now