The red line

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Quise seguir leyendo pero aquella voz volvió a hablar:

-Leo, hay que ir al colegio.- Dijo la madre

Como no sabia el significado de "colegio" decidí pasar. Seguí viendo el libro. Encontré una sección llamada: "Mi diccionario". Decidí ojear. Lo que habían eran palabras y observaciones. Sobretodo habían lugares. Empecé a ver todas las palabras: Asiento, Ático, Aula, Balcón, Barrio, Bosque...

Me paré en la letra " C" al encontrar esa extraña palabra que anteriormente dijo mi madre:

"Colegio"

Es un lugar donde que se supone que vamos a aprender cosas. Como nosotros tenemos ese problema no podemos hacer exámenes a si que cambiamos de clase y de compañeros todo el rato.

Leo-

Tras una segunda llamada de mi madre fui al salón. Ella me guió al coche y fuimos a un gran edificio. Yo llevaba la libreta en la mano. Cuando fui a entrar vi a varias personas con mochilas gigantes, unos se les veía nerviosos con libros en la mano y otros tan solo entablaban conversaciones. Me senté en un escalón y seguí leyendo la libreta. Entonces una especie de alarma sonó y el salón quedó vacío.

Pasados los 5 minutos una chica de cabellera color ruby pasó por en frente mía.

-Oye, ¿por que no estas en clase?-Dijo la chica

-No se a que clase voy

-Tu clase será la 320 seguramente, ve para allá y ya veras como es por ahí

Miré al rededor para buscar la clase y al visualizarla quise dar las gracias a la chica pero esta había desaparecido.

Fui a la clase donde la chica me comentó. Estaba llena de gente de mi edad tirando papeles o hablando. Decidí sentarme en un hueco que había vacío pero nada mas sentarme dos chicas me llamaron. Ambas eran castañas pero una tenia los ojos azules. Me hicieron un signo significando que fuera hacía allí, yo obedecí.