Luego de unos incómodos y al parecer, infinitos minutos, Harry sale del baño con ojos rojizos y pestañas mojadas. Se sienta en silencio frente a Louis que se encuentra igual que él y evita observarlo directo a los ojos.
"Cuando mamá murió yo.. yo estaba más que devastado" empezó el mayor, con voz temblorosa. "ella lo era todo para mí. No era tan sólo mi madre; era mi padre, mi mejor amiga."
Harry levantó la mirada y él era quién ahora no lo observaba.
"No tenía ganas siquiera de levantarme de la cama. Mis amigos estaban muy preocupados porque según ellos parecía mas muerto que vivo; estaba enfermo, y mi padre aprovechó eso. Fue allí cuando probé drogas por primera vez" el rizado pestañeó varias veces ante aquella confesión, pero más que sorprendido, estaba triste y preocupado; a pesar de todo, lo amaba, y le dolía muchísimo verlo contar por todo lo que había pasado.
Pero era necesario.
"Un día me llamó" Continuó. "me dijo que el podía darme algo que me hiciera sentir mejor y que yo sólo debía hacer unos envíos por parte suya" pausó unos segundos y limpió sus lágrimas. "yo.. acepté, y hice todo en lo que habíamos quedado. Entonces llegó el día de la primera entrega; era algo tarde en la noche pero no me importó, unos días antes me había dejado comprobar que realmente valía la pena y.. bueno, sólo quería seguir probando aquella mierda"
"L-Louis.."
"Así que lo hice" ignoró el susurro del ojiverde. "fuí hasta el lugar que me dijo, esperé un rato y llegó un chico algo mayor que yo y terminó invitandome a una fiesta, acepté porque.. pues me iba a dar un poco de lo que literalmente acababa de venderle. Y yo- no tenía nada mejor que hacer, ¿sabes?. Igual sí volvía a casa la iba a estar pasando peor" río con ironía. "Ó eso creí"
Harry bajó la mirada, aterrado; en cambio Louis, sólo mordió sus labios. "La cosa es que, nisiquiera recuerdo bien que sucedió exactamente.. estaba drogado como la mierda. Sólo sé que terminé en una casa que no era mía y con una chica a mi lado. No..no sé como mi padre se enteró, pero se armó tremendo lío."
"Louis"
"Mi padre me sugirió olvidarme de aquello, que él se encargaría.. pero hoy me ha citado, cómo sabe lo nuestro ha mencionado el tema.. Harry, créeme que eso me hizo madurar, yo- yo intenté renovar mi vida, lo hice, tu me ayudaste."
"Louis, ¿no has ido a verlo?"
El susodicho levantó la mirada unos segundos, para retirala enseguida.
"No.."
Harry suspiró. "Sí realmente maduraste, deberías hacerlo"
Silencio.
"Le he hablado a mi madre" habla el menor una vez más, captando de inmediato la atención del otro. "creo que.. ella cree que es hora de volver a casa"
Se paralizó.
"No, no.. Harry, yo-"
El ojiverde se levanta del asiento. "Te he dejado algo para cenar en el microondas, nos.. b-buenas noches, Louis" lo interrumpe y desaparece por el pasillo.
¿Era en serio? ¿era jodidamente en serio? Esperaba que no, que todo sólo fuera un mala entendido. Que haya malinterpretado lo que acababa de suceder hace unos segundos.
El de ojos azules quedó intacto en su asiento, como si hubiese visto al mismísimo diablo al frente suyo. Se mareó. Sintió incluso nauseas. Pero sólo se optó por dejar de aguantar las lágrimas que ya estaban deslizando con celeridad sobre sus mejillas. Ardientes como el dolor que hervía en su pecho. Sentía incluso cómo éste estaba siendo apuñalado continuamente.
