Capítulo 11: ADOLESCENTES

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Entonces volví a quedarme solo, otra vez. No sabía qué hacer, tampoco tenía las fuerzas necesarias para hacer algo.

Entonces apoyé mi cabeza sobre la almohada, y cerré mis ojos. Volví a recordar viejos momentos.

Me acordé de cuando era un adolescente y automáticamente me empecé a comparar con los adolescentes de ahora.

Me acordé cuando pasaba mi estancia en el colegio, aceptando que me escupieran y me empujaran. Me acuerdo de cuando me vestía con ropas oscuras y trataba de parecer malvado.

Pero, ¿por qué estaba pensando en eso? ¿Estaré delirando?

Me asusté, abrí mis ojos nuevamente, no quería preocuparme por nada más, no quería recordar nada más.

Miré hacia mis alrededores, solo estaba yo, en esta maldita cama, en este maldito hospital y con esta maldito enfermedad. Calvo, horrible y arruinado. Sin nadie a mi lado. No tenía a nadie que me pudiera pasar un vaso de agua siquiera.

El desfile negroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora