For You Forever

• Uno

Aquel chico veía el despejado cielo desde su cama, podía sentir el fresco aroma que traspasaba por la ventana, una cálida luz inundaba parte de la habitación.

–No te vayas por favor...

Escuchaba a alguien muy cerca de su oído, dentro de poco comenzaría a sollozar, ser obligado a recordar esos momentos que para él eran sentirse como si tuviera un vacío dentro de sí mismo para luego lamentarse por horas.

Siente una cierta presión en su pecho. Comienza a toser por la falta de aire que aquella acción le ocasionó

–¿Puedes escucharme?–

Esa voz que escuchó tiempo atrás vuelve a escucharlo, una lágrima recorre su mejilla.

–Te extraño...

Dijo con dificultad, las demás lágrimas no tardaron en salir, cubrió su rostro con su mano, no quería mostrar aquel gesto que estaba haciendo. Quería ocultar lo que sentía por aquella persona que tanto extrañaba.

Las lágrimas se detienen, la luz que estaba en dicha habitación se va. Siente como si de un momento a otro hubiera un frío dentro de él, comienza a temblar, se levanta de golpe, corre hacia dicha ventana que se ubica al lado de su cama, busca con cierta preocupación a una persona.

–¿Por qué? ¿Por qué te vas de mi lado cuando más lo necesito?

Chan Yeol se da por vencido y regresa a su cama, se sienta en la misma, pasa una de sus manos por las sábanas, sonríe ligeramente mientras trata de contener aquellas lágrimas que no lograron salir con dicho llanto de minutos antes, siente un cálido abrazo, al instante comienza a sentir dolor, intenta olvidar todo lo que había hecho anteriormente pero logran impedirlo.

–Te extraño Baek Hyun

Al decir dicho nombre siente un nudo en la garganta, tenía temor al decir ese nombre pero tenía la obligación de decirlo.

Va a su tocador, toma un marco, ve detalladamente el rostro de aquel chico, lo ve sonriente, dicho gesto del contrario provoca que Chan Yeol se sienta solitario, extrañaba tener a Baek Hyun a su lado, tener su compañía y ver continuamente esa sonrisa la cual amaba. Deja dicha imagen en donde la había tomado, cierra las cortinas que adornaban la ventana. Se dirige a un espejo, ve su reflejo por unos segundos.

–¿Me extrañas?

Se repetía una y otra vez en su mente, cubre nuevamente su rostro con sus manos, comienza a gritar el nombre de ese chico mientras sentía que su garganta se cerraba y que lentamente se iba a quedar sin aliento, se sienta en el suelo mientras lamentaba en voz alta la pérdida de aquel chico el cuál amaba tanto.