Celos en el Juego (EXO)

Capítulo 2: Juguemos con los nervios

Seguía en pie con aquellos intensos ojos abiertos y la muñeca que antes sujetaba Sehun, alzada al aire.

Lo había besado, lo acababa de besar un chico y no había sabido cómo reaccionar, ni lo había evitado, ni apartado, se había quedado simplemente quieto dejando que Sehun lo besara.

“Sehun acaba de robarme mi primer beso” pensó casi en shock unos segundos más tarde “¿Ese idiota me acaba de robar mi primer beso?”

Ahora si estaba molesto. Se pasó la manga de la camisa con fuerza sobre los labios con la clara intención de borrar aquel beso, aunque sabía que no sería posible lo hecho, hecho estaba pero la rabia no le dejaba pensar en eso, solo en borrar lo que Sehun le había hecho.

Cuando se cansó de frotarse con furia y le dolían los labios, se tiró boca arriba sobre la cama mirando al techo, sintiendo que su cara se incendiaba al ritmo de un volcán en erupción, así que se cubrió las mejillas con ambas manos.

 “Despierta, vuelve a la realidad” se dijo “¿Qué quiso decir Sehun con que sería posible? ¿Acaso puede conseguir que Kai… se fije en mí más que como un amigo?”

Por un segundo se dio el lujo de pensar en Kai, estar con él abrazados, besándose, dándose cariño… y con tantos pensamientos de ensueño, el calor volvió a envolverle.  

“No seas iluso Kyung, es imposible que eso pase, lo único que puede ocurrir es que ese tonto meta la pata y Kai no quiera volver a saber de mi”

Volver a pensar en Kai dejando de hablarlo hacía aparecer una presión en el pecho que subía por su cuerpo hasta quedarse atascado en su garganta, presionando con salir en forma de lágrimas. No deseaba perder a Kai, tenía que hacer que Sehun se callara y no le contara nada a Kai antes que fuera demasiado tarde.  Así que se levantó de la cama decidido y salió en busca de Sehun.

***

Todavía no comprendía por qué hizo lo que hizo, pero en aquel momento, no pensaba en ello con claridad. Hacía mucho tiempo que notó que a DO le gustaba Kai y le daba algo de pena verlo reteniendo sus sentimientos, pero aún más rabia le daba Kai porque tenía el presentimiento que él  sabía de los sentimientos de su amigo, pero fingía no saber o simplemente lo ignoraba, saber eso le ponía los nervios de punta porque le recordaba a él.

“Malditos desgraciados” pensó mientras bajaba las escaleras en dirección a la cocina.  

Cuando entró por la puerta de la cocina se encontró a Kai apoyado contra la encimera bebiéndose un vaso de agua algo abstraído. Saludó con un simple movimiento de cabeza cuando este se percató de su presencia y se acercó a la nevera a por algo de leche y así conseguir dormirse, llenó el primer vaso limpio que encontró y se colocó al lado de Kai mientras le daba un trago.

-          ¿Ya habéis vuelto tan pronto?- preguntó.

-          Cuando me llamaste estaba de camino, al final cambié de idea- respondió mirando su vaso de agua.

-          Ammm… entonces está bien, mañana toca ensayo así que debemos descansar ¿verdad?- sin esperar respuesta se dirigió hacia la salida.

-          Sehun- soltó de repente Kai.

-          Dime- Se paró en la puerta de la cocina cerca las escaleras.

Ahora Kai lo estaba mirando a los ojos fijamente, se notaba la tensión en el aire, semejante a el momento previo antes de un duelo, podía ver algo de molestia en su mirada, igual a cuando a cuando deseabas soltarle en toda su cara a alguien lo mal que te cae y no podías por algún que otro motivo, aunque la intención primera de Sehun era simplemente molestarlo, ahora quería que Kai se cabreara de verdad. Sabía que no era justo hacerle pagar por las culpas de otro, pero eso se lo merecía por parecerse tanto, por salivar del mismo cubo de mierda que la persona que amaba.