Te Encontré

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Se habían ido ya, era libre, pensaba ella sin siquiera imaginar algo más, Viernes por la noche y la casa sola, algo que a cualquier adolescente le encantaría, sus padres se habían marchado al sepelio de una amiga de mamá; no eran momentos para celebrar así que optó por preparar palomitas y soda, un par de películas de terror, uno que otro videojuego, la noche transcurrió en un abrir y cerrar de ojos; cuando ella lo notó ya eran diez para las doce, sus ojos, cansados del brillo de la televisión comenzaron a arderle, apagó todo, recogió las cosas y subió a su habitación.

Mientras se ponía cómoda, su celular vibró, era Judy, su amiga reclamándole su inasistencia a la fiesta de esa noche, ella sonrió mientras respondía el mensaje, lo colocó en su mesa de noche, mientras buscaba su playera del pijama, el aparató volvió a vibrar y ella sonrió con un aire de fastidio maldiciendo a su amiga por su insistencia al tema; entonces su sonrisa se transformó en una expresión de confusión pues el móvil decía algo más distinto al mensaje anterior, "¿Disfrutas tu soledad?...deberías considerarlo" sintió escalofríos, un número desconocido, "¿quién demonios, y cómo sabe que estoy sola?" se preguntó extrañada, pensó en sus amigos, pero lo descartó al recordar que no sabían ellos de la ausencia de sus padres, entonces palideció más, arrojó el móvil al montón de ropa que estaba frente suyo y se sentó en la cama, entonces un sonido la alertó, alguien tocaba su ventana, su temperatura descendió y su corazón se aceleró, pero armada de valor decidió abrir la cortina que, para su sorpresa, no era nadie; vaya susto, el móvil sonó de nuevo y ella dudó en ver, cerró la ventana con seguro y las cortinas emparejó, caminó al montón de ropa y tomó el teléfono con las manos temblorosas "Gracias por dejarme pasar, querida" leyó y sus pupilas sufrieron una contracción, ahora era presa de un miedo que no podía ver, pero podía sentir que estaba ahí, "Un, dos, tres por ti, ¡vamos a jugar!" volvió a leer y sus nervios se erizaron sin entender la razón de esos textos; de prisa corrió a la planta baja y cerró la puerta con seguros, las ventanas y la puerta del jardín también, avanzó a la sala con las luces encendidas, su teléfono volvió a vibrar; "¿Crees que eso me detendrá? Estoy donde menos lo esperas" decía el mensaje, y con los nervios destrozados corrió al despacho de papá, cerrando con llave se dispuso a buscar en sus cajones la revólver que tenían, pues era para situaciones de emergencia, temblorosa, cargó el arma como pudo y sin experiencia salió apuntando, junto con el móvil en mano, esperó no veía nada, y se dispuso a registrar la casa, nada, ni un movimiento alertador, entonces se relajó hasta que el teléfono volvió a vibrar, "Estoy justo tras de ti" y bruscamente se giró soltando un tiro que rompió el cristal de la puerta del jardín, no había nadie, "Vas a morir", otro texto y su mente comenzó a alterarla más y más, ya no había un lugar seguro, ella corrió arriba "Te encontraré...", ¡¿cómo?! No lo podía ver, sólo estaba vacilándole, haciéndola enloquecer, entró a su habitación y paró en seco, atenta escuchó, pasos en la planta baja que se acercaban a las escaleras, pasos pesados y atemorizantes, entonces mirando su armario se escondió ahí pensando que era el mejor lugar, con la pistola en posición guardó silencio, los pasos se acercaban; entrando en su habitación, por las pequeñas aberturas de la puerta podía ver, una sombra moviéndose por toda su habitación la cual paró un momento, y se marchó; exhaló suavemente, "debo llamar a la policía..." pensó y tomó su móvil, tecleó el número de emergencias, pero se quedó estática al escuchar una respiración detrás suyo, sus manos temblorosas soltaron el teléfono el cual ya estaba enlazando la llamada, el tiempo parecía más lento, y su sudor frío le helaba la piel, "Te encontré..." susurró la voz mientras unos brazos la arrastraron hacia la infinidad de aquella oscuridad, en la cual lo último que pudo escuchar la operadora quien ya había atendido, fueron los desgarradores gritos de Arleene, a quien nunca más se volvió a ver.

Deep Mini StoriesWhere stories live. Discover now