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T A R A
A raíz de mi relación con James, mis padres y los señores Potter mantienen una mejor relación. Mi padre ya no está tenso cuando estamos todos juntos y eso es un gran avance.
—¿En qué piensas? —preguntó asustándome un poco, se le está haciendo costumbre.
—Pensaba en cómo será nuestra vida cuando volvamos a nuestro presente. Sabemos que muchas cosas cambiarán, algunas para bien y tal vez otras cambien el curso completo de la línea de tiempo —reflexioné.
—Bueno, al menos sabemos que tía Tonks, tío Remus y mi tío George, estarán de vuelta cuando volvamos —sonrió ladino.
—Sí, nuestros padres también tendrán una mejor relación.
Llegamos a la sala común de Slytherin, habíamos acordado con nuestros padres despedirnos en las salas comunes de cada casa. Al entrar -no sin antes despedirme de James quien iba a la sala de Gryffindor- divisé a mi familia en el centro.
—Scorpius, Tara, vengan —indicó mi padre quien estaba cerca de la chimenea junto a mamá —. Cuando vuelvan a Hogwarts, esto estará esperándolos, es una especie conector. Si tu hermana está en problemas avisará al igual que si tu hermano lo está, hará lo mismo —explicó mientras escondía unos anillos por la chimenea.
—La razón por la que no se las damos ahora es para que el encantamiento no sea alterado con el viaje del tiempo aunque es poderoso no queremos correr riesgos —dijo mamá.
—Claro, mamá —respondió Scorp.
—Gracias —respondí y junto a mi hermano hicimos algo que queríamos hacer desde hace tiempo, los abrazamos.
[...]
Ya era de noche y todo el mundo en la sala de menesteres se encontraba dormida, yo no podía dormir. Me levantaba de mi cama, eran alrededor de las diez y media, once de la noche. Bajé a la sala común encontrandome con una perosna allí, James.
—¿Qué haces aquí? —pregunté mientras me sentaba a su lado frente a la chimenea.
—Estoy trasnochado, no he podido dormir.
—¿Quieres compañía? —pregunté sonriendo.
—Si es tuya, sí. Además ya te sentaste —dijo mientras posaba su cabeza en mis piernas yo empezaba a acariciar su ruloso cabello. El silencio perduraba en la sala, era cómodo, las llamaradas del fuego era lo único que se escuchaba y era tranquilizante.
Y pensé que había llegado el momento.
—¿James? —hablé suave.
Él haciendo un ruido, me hizo entender que tenía toda su atención aún si tuviese los ojos cerrados.
—Sólo quería decirte —reí un poco —. Te amo —dije sin titubear.
De un momento dejé de sentir el cabello de James entre mis manos al igual de su cuerpo recostado, lo miré y tenía sus ojos muy abiertos y abría y cerraba la boca como si fuera un pez.
—¿En serio? —preguntó sin creerlo —. ¿Dijiste esa palabra? ¿Dijiste que me amabas?
—Eso es lo que siento, pensé que tenías que saberlo —de pronto, James comenzó a celebrar en silencio, mientras yo, me reía.
—¡Sí! ¡Sí! ¡Sí! —saltaba mientras intentaba no hacer mucho ruido — ¡No sabes cuánto esperé este día! —dijo susurrando, se acercó y me besó, un beso que transmitía todo nuestro sentir el dicho y el que aún faltaba por salir —. Te amo, en serio, no sabes cuanto lo hago.
La felicidad no cabía en nuestros cuerpos, nos subimos al sofá y nos acurrucamos en él quedándonos poco a poco dormidos dándonos mimos. Mi corazón estaba feliz al saber que la persona que amo, me ama de la misma manera que yo a él.
Editado: [05/06/21]
este salió rápido porque no había mucho que editar, un sólo capítulo y el epílogo y tg se termina, lloremos.
