Capitulo 1-La bola de fuego concluye un día horrible

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(" Si Rick, voy lo mas rápido que puedo, aguanta un momento..... Listo , creo que esto ya esta encendido" )

Emm, hola, bueno...¿por donde empiezo? Tengo un mensaje para todos ustedes. ("¿Que? oh por dios Rick¿no puede esperar? aghhh esta bien.") Bueno, antes de esto tienen que comprender la situación, y la única manera que veo de que la entiendan, es contándoles la historia. Pero antes algo sobre mi. Mi nombre es Aiden , tengo 15 años, mido 1.75, no soy ni gordo ni atlético, algo moreno pero más que nada por el sol, ojos verdes, pelo negro, y con una belleza deslumbrante (no tanto).("Ya, ¿satisfecho?, muy bien"). Crecí y vivi en la Ciudad de México toda mi vida, y antes de que mi vida se fuera en un salto mortal,mi casa estaba en el numero 105 de la calle Zamora de la Condesa.

Okay, ahora que eso esta fuera del camino, empecemos. Mi día empezó bastante normal, me desperté tarde, confundí la leche con la crema y tuve un cereal no muy nutritivo de desayuno y salí corriendo hacia mi escuela, todo sin despertar a mi mama, que aun seguía dormida tras el trabajo.Ser abogada en la CDMX es desgastante, mas cuando eres madre soltera y tienes que criar a un chico saliendo de la secundaria (culpable) y un actor con una reputación en aumento, ya estábamos acostumbrado a este estilo de vida.

Al salir de mi casa, me encontré a mis mejores amigos esperándome, Austin y Ricardo. Ricardo (alías Rick)estaba recargado en un semáforo, su corbata y camisa perfectamente arregladas, mirando a la calle mientras platicaba con Austin, mientras este se acostaba en las escaleras que llevaban a mi casa. Nuestro grupo de amigos puede parecer desde lejos bastante curioso, Rick es el más alto de los 3, gracias a su amor al basquetbol (nunca le pregunten nada o no se callara), pálido comparado a Austin y a mi, con sus lentes guardados en el bolsillo de su camisa. Austin en cambio, siempre andaba desarreglado, el día que recordara traer su corbata podría considerarse legendario, y con diferencia el mas moreno de los 3, si lo vez de lejos hasta lo podrías confundir con un hindú, y nadie te juzgaría por ello.

–Al fin nuestro lord se ha dignado a presentarse ante sus súbditos– dijo Rick al verme, mientras me hacia una reverencia al punto que casi se tocaba la punta de los pies con la nariz.

–Callate Rick, ¿Quién fue el que necesito que lo cubrieran con sus papás para escaparse con su novia?– le respondí.–Ademas, solo se me hizo un poco tarde.–

–Mmm claro, si tu crees que "un poco tarde" es 5 minutos antes de que cierre la puerta de la escuela– dijo Austin mientras se levantaba de las escaleras

–¿QUE?–

– Así es mi señor, gusta que convoque su carruaje.– decía Rick mientras se echaba la mochila a la espalda.

–¡CALLENSE Y CORRAN!– les grite. Debí de haber hecho una cara muy graciosa, ya que ambos se rieron, antes de agarrar sus cosas y echar a correr detrás de mí.

Llegamos en el momento en que el Señor Walt, el conserje de la escuela, cerrara la puerta. Logramos llegar a nuestra primera clase del día, Inglés. La señora Marta, la maestra de ingles, se paso toda la clase dando una lectura aburrida sobre la independencia de E.U.A, pero no había muchas razones para mi por la cual debería hacer caso a la clase. 1-Miss Marta ya me odiaba por ser un poquito distraído en sus clases y 2- La razón de mis distracciones estaba sentada al lado mío.

July no dejaba de hablarme, mandarme notas y mensajes, picarme con su lápiz, lo que sea con ganar mi atención. Pero, aquí esta lo curioso, July era la chica más popular, social, guapa ( según Rick y Austin) y yo un don nadie que trataba de no quedarse dormido durante Ingles. Okay, las chicas que estén oyendo esto dirán : AY DIOS LOS HOMBRES, ES TAN OBVIO QUE LE GUSTAS, pero el caso es que, esto empezó a ocurrir de un día para otro, hace 2 semanas. Antes de esto ella y yo no hablábamos ademas del "Buenos días" de un compañero a otro. Por lo cual me distraía tratando de averiguar que rayos quería esa chica, ya que no estaba de acuerdo con lo que decían Rick y Austin de que le gustaba ("ven, alguien más lo había pensado, chica que dijo lo de antes") simplemente era demasiado... raro.

La treguaWhere stories live. Discover now