La razon de estar contigo.

5. El pasado de Ian 1/2

Marck.

Cuando dije eso, él giro la cabeza rápidamente y estaba sorprendido y triste a la vez, Max ya me había soltado él brazo así que me senté en un sillón para escucharlo... Esta noche va a ser larga, así que me senté al igual que Max en otro sillón y él comenzó a hablar.

I- bueno pues... Yo no quise... Abandonarlos... Ni lo hice... Lo que paso fue...

Flashback.

Ian.

Estaba nervioso, hoy le diría a mis padres lo que soy, no se si se lo tome bien pero... Ya no pienso ocultárselo, hiba caminando hacia mi casa, mis padres a veces eran muy fríos pero... Nunca nos habían abandonado y por eso tome la decisión de decírselos, aprovechando que mi hermano hoy se quedaría en casa de un amigo, y que nos hibamos a mudar, así no serian tan graves las cosas, cúa do llegue a casa, un ataque de nervios me invadió, y dudaba si decirlo o no, pero tome confianza y tome él pomo de la puerta para seguidamente entrar y ver a mi padre leyendo él periódico y a mi madre a un lado viendo la televisión, cuando cerré la puerta dejaron de hacer sus actividades y me voltearon a ver, yo les había dicho que hoy les tenia que decir algo importante, así que ya sabían un poco mis planes, así que comencé a hablar.

- emmmm h-hola...

Madre y P- hola hijo.

Mierda! Me puse mas nervioso.

- emm...

P- que nos quieres decir hijo? Te han hecho algo en él colegio?

- no... Les quería decir que yo...

Madre- tu que hijo?

- yo... Soy... Gay...

Mi padre se levanto, yo solo baje la mirada para recibir él golpe, pero en lugar de eso, cuando abrí los ojos... Mi padre estaba hecho un demonio... Mi madre estaba paralizada o eso aparentaba porque no se movía, entonces volví a ver a mi padre y levanto su brazo señalando las escaleras y empezó a decirme apretando sus dientes...

P- ve a tu cuarto... Ahora!!

Yo solo obedecí y lo mas rápido que pude me encerré en mi cuarto y escuchaba su discusión desde la puerta de mi cuarto.

P- te dije que no lo consintieras!!! Ahora por tus "cariñitos" tengo un hijo maricón!!

M- p-pero es nuestro hijo... Es tu sangre...

P- me vale un comino que tenga mi sangre!! Yo no tolerare a un hijo así, y agradece que lo dejo serio y no agarro un cuchillo para cortarle los huevos!!

M- yo no tengo que agradecer nada!! No lo haces porque lo amas!!

P- corrección señorita!! Lo amaba, antes de que se volviera un puto maricón!!

M- ya basta de llamarlo así!!

P- yo lo llamo como quiera, y te diré algo, él ya no es parte de mi familia, y maldigo toda la sangre que él haya heredado de mi, feliz? Ahora... Ve y dile que agarre las maletas que ya tiene hechas y se largue de aquí, y ojo con decirle algo a Marck, porque si no tu te vas con él, entendido?

Ya no escuche ninguna palabra mas, solo pasos que se escuchaban que se hiban acercando a mi habitación, como ya sabia lo que hija a pasar, tome mis maletas y antes de que llamaran a mi puerta, yo ya estaba saliendo de allí mientras veía a esa tigresa de pelaje blanco que era mi madre, tenia los ojos rojos y de ellos brotaban lágrimas que se mezclaban con él maquillaje yo solo la mire y ella me abrazo, dándome unas palabras de despedida.

M- te amo hijo, recuerdalo... Si algún día nos encuentras y yo ya no existo en este mundo... solo recuerda que yo te amo, y siempre lo haré sin importar que... Toma...

Ella tomo mi mano/pata y me dejo un collar que tenia un corazón y decía "te amo, no lo olvides" yo solo cerré mi mano/pata y la mire a los ojos, ella estaba triste se notaba en su mirada, ella me reclamó la ultima sonrisa que vería de ella en mi vida y me beso la frente, yo solo solté mi maleta para abrazarla un momento y reanudar mi ida, viendo por ultima vez a mi padre, y yo solo le dije...

- te amo papá, aunque tu me odies yo te sigo amando, puede que para ti ya no sea tu hijo, pero para mi siempre seras mi padre...

Me dirigí a la salida de la casa, y recordé a Marck, había pensado en dejarle una carta, pero metería en problemas a mi madre así que no lo hice y salí de la que antes era mi casa, ahora entiendo porque en los libros y películas dicen que odian las  despedidas, son fáciles de hacer, pero difíciles de aceptar, cuando las realizas sabiendo que no los volverás a ver, duelen aun mas, te dejan un vacío en él corazón que jamas se llenara con nada, cuando me di cuenta y deje de reflexionar, estaba en un callejón, no quería hablar ni decir la típica frase "porque?" yo ya sabia la respuesta a esa pregunta, seria estúpido preguntarlo aun ya conociendo la respuesta, y esta era que en esta sociedad, siempre hay una competencia, en este mundo las personas si no cumples sus expectativas y no eres lo que ellos dicen que eres, entonces te odiaran, porque no eres como ellos quieren que seas, convirtiéndose en unos ignorantes, en animales sin corazón, creyendo ser mejores que los demás y que al sentirse así pueden controlar tu vida, tus acciones, y cuando se dan cuenta de que no haces lo que ellos quieren, te empiezan a odiar, a despreciarte, a sentir que como no eres lo que ellos quieren, que vales menos, solo algunos son capaces de darse cuenta que no es así, y aceptar su errores ,mientras que otros, están dominados por la envidia, por lo material, sin darse cuenta de lo que se vuelven por dentro, aprovechando que algunos no se pueden defender, sintiéndose bien, y cuando se dan cuenta, muy pocos son capaces de perdonar lo que alguna vez dejo huella en su corazón, entonces me di cuenta, de que no existen las razas ni las especies, tampoco las clases sociales, solo existen dos tipos de personas, las buenas: que son las que hacen acciones buenas sin esperar nada a cambio, y las malas: que son las que están dominadas por la avaricia, por él odio, y hacen lo que sea para que la gente se sienta como ellos, y no se dan cuenta del daño que hacen, entonces una brisa fría me saco de mis pensamientos, y mire al cielo dándome cuenta de lo tarde que era, me puse un suéter y tome otro para usarlo como almohada junto con una cobija para no sentir él frío, al menos tengo algo con que cobijarme estos días... O meses... O años... Entonces él dolor me domino y empecé a llorar en él frío piso de ese callejón, solo, arriesgándose a los peligros de la ciudad, sin la calidad de mi hogar ni la de mi familia, hasta que cerré los ojos y logre conciliar él sueño, con lo cansado que estaba no fue difícil tendría que acostumbrarme a mi nueva vida de vagabundo, si ya me maltrataban por ser de otro color, mas lo harían por tener una sexualidad diferente, porque vivimos en este mundo tan podrido?.

Continuara...