La pena de Sableye

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-Blasco: Se lo digo juez ¡NO ESTOY LOCO! Si quiere le repito la historia una y otra vez.-

-Juez: ¿Como dijo que se llama?-

-Blasco: Es Blasco su señoría... ¡Blasco!-

-Juez: Okey tranquilízate y cuéntame lo que pasó.-

-Blasco: Esta bien pero por favor ¡créame!-

-Juez: Eso lo veremos sobre la marcha.

Todo se remonta hace 3 semanas, yo estaba continuando con mi aventura y queria vencer a Marcial y conseguir mi segunda medalla de gimnacio.

Yo había logrado vencer dificultosamente a la líder Petra ya que mi equipo era muy debil que en ese momento constaba de un pequeño Ralts, Zigagoon y un Lombre, al llegar a ciudad Azuliza, con ayuda del Cap. Babor, Me decidí por atrapar un nuevo pokemon en la famosa Cueva Granito.

Al entrar me encontré con un agradable montañero exausto, lo mire y le dije:

-¿Qué ocurre?-

-Montañero: !Hagas lo que hagas no entres ahí es por tu bien!-

Observé que su espalda tenía marcas de garras y estaba sangrando.

-¿Señor quiere que pida ayuda?- (Con la voz temblorosa)

-Montañero: No es necesario, puedo moverme hasta un centro pokemon.-

-El causante de esto no era un pokemon ¡ERA UN ANGEL DE LA MUERTE! Al menos eso me susurró.-

Yo pensé pff un pokemon susurrando este debe estar loco y se callo dentro de la cueva, ahora seguro esta delirando.

-Montañero: Creo que era un tipo fantasma, recuerdo haberlo visto antes pero no me sale el nombre, tenia unos aterradores ojos brillantes y afiladas garras.- (Con la mirada perdida y temblando)

Despues recordé que el tipo fantasma es inmune al lucha y el gimnacio de esa ciudad era de ese tipo.

Debió haber sido fea experiencia ¿Quiere que lo acompañe al centro pokemon?

-Montañero: No es necesario, puedo caminar pero por lo que mas quieras no entres alli.- (llorando y agitado)

-Esta bien tranquilícese.-

Una vez que se fue me quede sentado media hora decidiendo entre dejar de ser un cobarde y entrar para ser un mejor maestro pokemon o decepcionar a todos y ser un gallina, yo era un acobardado hecho y derecho pero un pokemon susurrando era imposible asi que por lógica decidí adentrarme... mi peor decisión.

No poseía ningun pokemon con destello pero por miedo saqué a mi zigzagoon para no sentirme tan solo, despues de un rato caminando en busca de ese pokemon hasta que tanto yo como mi pokemon empezamos a sentir un desagradable olor a podrido, era insoportable tanto que te hacía llorar.

De tanto en tanto se escuchaban nuestros pies chapoteando en charcos, era imposible ver algo asi que saque una caja con 10 cerillas, saque una y la encendí, imaginen mi sorpresa cuando vi que las manchas en el piso no eran de humedad como había pensado si no ¡Sangre!

Temblaba, me costaba respirar y tragar del miedo así que alzé a mi zigzagoon y corrí con todas mis fuerzas pero una roca me hizo tropesar. Al despertar me dolía mucho la cabeza, estaba sangrando y mi amigo ya no estaba ahí.

Me asuste mucho y estaba totalmente desesperado buscando a mi pokemon, el olor a podrido era todavia mas insoportable fue ahí donde no logré contenerme entonces me inundó un abundante miedo por lo que caí de rodillas, rompí a llorar y solté el grito mas grande de toda mi vida, la situación me alteraba y todo estaba aún mas oscuro, recorde mis cerillas y prendí otra inmediatamente.

Tomé coraje y me propuse a encontrar la salida caminando y caminando sentía que cada vez estaba mas lejos de escapar, fue ahi donde comenzé a sentir rasguños en las piernas y una voz diciendo cosas macabras, cosas que nadie mas ademas de mi sabe.

Después de un rato largo asi ya había gastado 4 cerillas por lo que me quedaban 4 más, seguía caminando sin importar el olor, los rasguños y los susurros se acabó otra cerilla por lo que saqué otra y al prenderla lo vi... vi como ese monstruo estaba deborando a mi zigzagoon, ya no sabía que sentir pero antes de poder hacerlo parpadeé y estaba frente a mi entonces apagó la cerilla de un soplido.

Y no solo era mi compañero, había pilas de cadáveres humanos y de pokemon en una fila, el era como lo describió el montañero: ojos brillantes, largas garras y dientes afilados, no lo podía creer pero era el mismisimo demonio, sin poder hacer nada saque a mi Lombre.

Casi como una sombra de rápido apareció al lado de mi pokemon lo degolló con sus garras, luego tomo su cabeza y de dos grandes mordiscos ya no estaba, para mi era imposible que un pokemon haya hecho eso, se acercó dando pequeños pasos y yo estaba paralizado por el terror y en shock por lo que había ocurrído.

Mi ralts salió de su pokeball sin que lo llame y empezó a tirar sus mejores ataques psiquicos. Yo impresionado no entendía por qué me ayudaba. Después de 10 ataques por segundo parecía no afectarle nada.

Mi ralts volteó la cabeza y me miró con esos ojos que nunca voy a olvidar, acercandose lentamente el mounstruo llego a el y le encajó un mordisco en la ayugular muriendo por desangramiento.

Se acercó a mi y yo le grite:

¡QUE ES LO QUE QUIERES DE MI... POR QUE, POR QUE A ELLOS, MIS UNICOS AMIGOS!

El me susurró... tu me viniste a buscar

Estaba impactado y enojado asi que solté mi probablemente último grito de guerra y corrí hacia el con todas mis fuerzas a acertarle un golpe y lo logré, rompí sus ojos de los cuales brotaba sangre de rojo atardecer.

Me dijo: yo no soy un pokemon... no soy algo vivo, no poseo sentimientos... soy tus miedos, tus pecados y todo lo malo que tienes aun que me conocen mejor como satanás.

Se acercó a mi y de unos cuantos mordiscos me arrancó las piernas y los brazos y yo sin poder perder mas sangre me desmallé con lo ultimo que me dijo: yo solo dejo vivos a los que se arrepienten pero les cuesta el poder volver a caminar ver o sentir.

Desperte en el hospital una semana despues y henos aquí, usted en su asiento y yo en mi silla de ruedas sin ver y ni siquiera puedo moverla yo mismo.

-Juez: señor lo que usted describe es totalmente imposible.-

-Blasco: se lo juro era un demonio.-

-Juez: perdon pero... usted sera enviado a un manicomio de alta seguridad, no podemos permitir este tipo de locos sueltos.-

-Blasco: ¡CUANDO EL LO ATRAPE A USTED SE ARREPENTIRA!-

-Juez: no creo que eso pase (con tono burlón)
Hasta pronto Blasco.-

La pena de Sableye (Pokémon Creepypasta)Where stories live. Discover now