Del Lado De La Ley

PROLOGO

Después de algo mas de un año en la cárcel;

-¡Evans! –La agente de policía golpeo los barrotes con la porra -¡Tienes visita!

-¿Otra vez? –ella desvió la vista tranquilamente del libro que leía y suspiro –Ya he dicho que no quiero ver a nadie

-Tienes que verle –la mujer abrió la puerta –Es tu abogado

-¿Mi abogado? –Frunció el ceño ¿Qué abogado? Había rechazado a los abogados de sus amigas, al de Jordan  ¿Quién era ahora?

-Vamos –La agente mantenía la puerta abierta

-Esta bien –Dejo el libro sobre el camastro y se bajo de el .  Tranquilamente salio de su celda y camino por el pasillo dirección a la zona privada .  Conocía perfectamente esta cárcel y se movía por ella como si fuera su casa .   Espero ante la puerta de seguridad a que llegara la agente y cuando esta estuvo a su lado, marco un código y la puerta se abrió .  Después camino acompañada por otra policía hasta la zona de visita y para su sorpresa en lugar de entrar a la sala grande la llevaron a una privada .  Cuando entro observo a un hombre de unos cincuenta años, con bigote y gafas, que estaba muy bien vestido . El la miro y sonrió –Usted no es mi abogado, yo no tengo abogado –se sentó frente a el

-Pero puedo serlo, si acepta lo que vengo a proponerle –El sonrió

-¿Y que es lo que me propone? –Dana se acomodo en la silla -¿Y quien le manda?

-El quien no puedo respondérselo –la miro a los ojos –No hasta que acepte el trato

-¿Y que le hace pensar que aceptare? –levanto una ceja –Lo único que puede ofrecerme es la libertad y no me interesa

-Mi jefe puede ofrecerle mucho mas –hablo convencido –A parte de su libertad

-¿Y que es? –Dana frunció el ceño

-Poder –sonrió con frialdad –Poder para vengarse de aquellos que le arrebataron todo, dinero, contactos, una situación mejor aun que la que tenia junto a su padre

-¿Y que es lo que quiere a cambio? –Lo miro desconfiada

-Sus contactos, su experiencia, su reputación –se quedo pensativo –Como explicarlo  Usted es la hija de Evans, el tenia muchos contactos, socios  y todos ellos la conocen

-Quiere la confianza –Dana sonrió –La confianza que yo puedo obtener de los socios y contactos de mi padre, quiere todo lo que yo se de ese mundo

-Así es –El asintió –Y la recompensara bien por ello

-No –Dana se levanto de su lugar –No me interesa

-Piénselo –El la miro caminar hasta la puerta –Vendré en unos días, a buscar a una respuesta