Perdiendo Recuerdos

Strange feelings

Regina se había quedado toda la semana cuidando de Emma como si aquello fuese tan normal y cotidiano.
Los días pasaban y Emma comenzaba a recuperar la movilidad de su cuerpo poco a poco pero su memoria parecía no querer hacer lo mismo.

"Regina" Emma parecía preocupada por algo que Regina no entendia. "Hoy no vi a Henry " pero era realmente eso lo que le preocupaba."¿sabes porqué no vino hoy nuestro hijo?" Desde que Regina le había explicado como había sido su vida antes del accidente,ella había tenido que acostumbrarse a hacer y decir algunas cosas. Y desde ese momento llamar nuestro a su hijo le parecía tan natural,como si siempre hubiese sido así.

"Hoy iba a pasar a casa de Mary,debía cuidar de tu pequeño hermano." Sabrá Dios que paso en ese momento por esa cabeza para que la rubia sonriera y por alguna extraña razón Regina se había quedado bobamente admirando su sonrisa. Encontraba a Emma encantadora cuando sonreía así,sin preocupaciones y sin miedos. En cuanto se dio cuenta de lo que estaba haciendo sacudió su cabeza. "Pero dijo que para la tarde que te dieran de alta vendría por nosotros para ir a celebrar que salieras del hospital." Aquello causó una sonrisa triste en Emma que Regina no paso por desapercibida. "¿sucede algo Emma?" Se acercó a ella y tomó sus dos manos entre las suyas.Un gesto que venía haciendo desde unos días para acá.

"¿qué crees que pase si mi memoria no regresa?" Aquello encogió el corazón de Regina.,pues la misma pregunta había rondado varias veces por su cabeza y hasta en sus sueños,si su memoria no regresaba los bellos momentos que vivió con su hijo y sus padres desde que se conocieron serían irrecuperables para siempre,aunque aquello le causaba un poco de alegría pues olvidaría al odioso pirata que tenía como pareja pero también de alguna extraña manera la ponían triste porque olvidaría para siempre todos los momentos vividos con ella,sus peleas,sus reconciliaciones,su amistad,sus luchas juntas pero sobre todo olvidaría que siempre habían sido el pilar,la una de la otra.

"No te preocupes Emma" acarició con el pulgar la parte superior de una de sus manos y sonrió tratando de tranquilizarla,aunque ella no lo estuviera. "Haré todo lo posible para que recuperes tus recuerdos. Te lo prometo." Le apretó levemente las manos para darle esperanza de recuperar su vida. Aunque aquello de alguna manera tan extraña le doliera en las entrañas.

"Gracias.." le devolvió la sonrisa. "Eres una persona muy buena" le acarició la mejilla a Regina,que ante aquel simple toque sintió una corriente eléctrica cruzarsele desde la cabeza a los pies y la hizo estremecerse.

"Emma vengo a cambiarte por última vez las vendas.." Aquello pareció una señal mandada del cielo,pues sino hubiese sido por la enfermera,Regina hubiera salido corriendo.

"Yo..debo ir al baño." Le dijo a Emma como excusa para escabullirse de esos extraños acontecimientos. Pero la mirada dudativa de Emma pareció quererle pedir que se quedará. "No tardó Emma,lo juro." La rubia sólo asintió levemente mientras ella le dedicaba una sonrisa mediante se desplazaba fuera de la habitacion. "Sólo fue tu imaginación Regina" se decía a sí misma en el espejo del sanitario.

"¿Mamá?" Su hijo había ido a buscarla. ¿cuánto tiempo llevaba en el sanitario? ¿acaso aquellos pensamientos le llevaron a perder la noción del tiempo? "Se que estás aquí mamá,sólo para avisarte que dice mi madre que ya a firmado el alta y ésta lista para volver a casa." Al parecer si había transcurrido bastante tiempo después de su huida de la habitación de Emma.

"Esta bien Henry." Se hecho un poco de agua en el rostros. "Vamos,llevemos a tu madre a casa." Lo tomo de los hombros sonriendo para así emprender su camino de nuevo con Emma.

"Esta todo listo" parecía muy feliz de irse de aquel lugar. "E firmado el alta y ahora puedo ir a casa." Parecía nerviosa. "Lo malo es que no recuerdo siquiera si tengo la llave." Sonrió tímidamente.

"Primero iremos a Granny's a celebrar tu salida." Le ayudó con la pequeña maleta que Mary y David se habían encargado de hacer en cuanto supieron que su hija había despertado y sabrían que ella necesitaría algunas cosas. "Tus padres nos esperan ahí,ya después nos preocuparemos por lo demás,¿te parece?" Emma parecía una niña pequeña observando con una sonrisa todo el paisaje que desfilaba por la ventana del Mercedes.

"¡Emma!" Mary la abrazo,al principio Emma se había sentido incómoda pues nadie más que no fuera su doctor,las enfermeras,Henry o Regina habían tenido contacto físico con ella. Pero conforme pasaban los segundos fue devolviendo el abrazo a la que según Regina era Su madre. "Te extrañamos demasiado mi pequeña." Emma se sonrojo levemente.

"Princesa no vuelvas a darnos ese tipo de sustos." Ahora fue David quien la abrazo con la intención de no soltarla nunca más. A Emma le pareció más fácil acostumbrarse al calor de padre que emanaba David en aquel abrazo. "No vuelvas a hacerlo jamás." Le miró a los ojos,en realidad parecían angustiados,entonces oyó una pequeña risita infantil y supo entonces que su hermano menor estaba ahí.

"¿puedo?" Preguntó a Mary quien sorprendida le pasó al pequeño Neal. "Hola" Emma le sonreía a su hermano quien a la vez le devolvía la sonrisa a ella,parecían entenderse a pesar de las diferencias tan grandes de edades. "Hola hermanito" Mary y David sonrieron con lágrimas amenazando salir. Aquella imagen era tan bella que nadie pudo retener el impulso de tomar captura en foto de aquel hermoso momento entre hermanos,ni siquiera Regina quien sonreía parada a un lado de Henry. "Vamos a comer pequeño." El bebé pareció entender y comenzó a mover sus manitas.

Todos se sentaron en la mesa,Mary y David juntos,mientras que Regina,Henry y Emma con el pequeño Neal en los brazos enfrente de ellos. "¿Mamá?" Mary sonrió apreciando aquel su nombre lleno de tanto significado. "¿puedo alimentar a Neal?" David pareció buscar algo en la maleta de Neal hasta encontrar una papilla de frutas y una cucharita que paso a Emma. "Gracias" nadie podía negarlo,menos Regina,esa escena causaba demasiado en ella. "Haber Neal,abre la boquita" Emma hacia gestos graciosos (e adorables en opinión a Regina) para que el bebé comiera. "Si así Neal" parecía toda una hermana mayor acupandose de las necesidades de su pequeño hermano. Todos parecían felices a pesar de que las memorias de su madre e hija tardarían o no volverían todo aquello que pasaba en ese momento era una bendición.