Inmortales I: Prisionera

22: Seamos equipo

Anzel aún así contando con la palabra del vampiro Raymon, este seguía inseguro. En su mente pasaba constantemente el hecho de que la princesa vampiro lo use para que Aída sufra, como sólo una carnada.

Raymon no paraba de intentar quitarse las cadenas de las manos, pero aún así haciendo su mayor esfuerzo no lo lograba, pero se detuvo al instante cuando escucho cómo alguien se acercaba por el otro lado de las paredes, entre las voces reconoció la de su hermano, que decía;

—Tu serás el primero que maté, te lo aseguro— lo amenazo Glenn

—Ya quiero ver eso..— respondió otra persona, que fue fácil reconocerla, era Elias.

Abrieron las puertas y los chicos encadenados pudieron ver sus rostros, el de Glenn lleno de sangre, y el de su nuevo enemigo, el híbrido Elías.

—¡Maldito Bastardo!— le comenzó a gritar Raymon. —Disfruta esto, porque cuando matemos a todos acabaremos con los Tanner, haremos que su apellido sea olvidado.

Elías lo miró fijamente unos segundos y luego tragando saliva continuó con lo que haría, que era encadenar a Glenn del otro lado de la pared.

—Demasiadas amenazas, lamentablemente no estarán para cumplir ni una— se burló Elías.

Glenn se recargo en la pared mientras que sus manos estaban llenas de cadenas, impidiéndole huir. El híbrido les sonrió a los tres y salió del pequeño lugar, similar a un calabozo.

—Estamos muertos..— murmuró Raymon dándose por vencido.

—Bueno, prácticamente ustedes sí lo están, ya saben son vampiros y.. — Glenn calla al humano.

—Guarda silencio Anzel.

—No se me ocurre nada...— comentó el otro Adamson que estaba frustrado.

—¡Aída!— tenía una idea Glenn —Ella va a preguntar sobre nosotros, y luego llegará hasta aquí..

—¿Que es lo último que recuerdas?— esta vez habló Anzel curioso —O sea no pasó nada impresionante — le lanzó una mirada pícara a Raymon —O sea nada de nada..

—¿De qué hablas?— cuestionó el menor Adamson.

—Ya sabes..— vuelve a mirar a Raymon

—¡Ah, eso! Claro que lo recuerdo, el beso entre Raymon y Aída.

El chico Raymon suspiró fuertemente mientras fulminaba con la mirada al humano.

—¿Donde está Aída entonces?— preguntó Glenn.

—Se la llevó la princesa mientras poseía tu cuerpo..

—Perfecto— murmuró sarcásticamente.

Soraya.

Las horas pasaban y nadie aparecía, lo primero que se me vino a la mente fué que Glenn los había matado, pero no creo, aunque haga el papel de malo, sé que detrás de eso hay un chico normal y bueno.

Elías me dió un beso en la mejilla y me susurró unas palabras "Perdóname" dijo y salió corriendo hacía una dirección concreta. No sabía a qué se refería, pero la intriga me consumía así que decidí investigar. Me puse de pie y a mi alrededor había solamente hombres lobo conversando hasta que uno llegó a mi aterrorizado.

—¿Eres Aída?— preguntó.

—No, soy su hermana, Soraya .

—¿Conoces a Anzel Jackson?

Lo miré uno segundos fijamente y recordé.

—¡Claro! Tu eres la pareja de Anzel ¿no?

—Bueno pareja no.. pero salimos un par de veces.

Rodé los ojos —Pero eres el que llegó en la pijamada ¿no?

Asintió en silencio.

—Solo dime ¿lo mató Raymon?— me sujeto de los hombros con desesperó.

—¿Que?— retrocedí —Que yo sepa no, pero tal vez fué su hermano..

—¿Y como porque? ¿Por ser gay?

—Claro que no, ¿Que te pasa? aparte no hay necesidad de haber una razón para que un Adamson acabé con tu vida.

Pegó un golpe contra el árbol que  estaba detrás mío.

—Ellos no pueden matarlo tienen un trato con el Gran Alfa.

—De hecho el trato es que no pueden matar a uno de ustedes, pero como sea, no creó que lo hayan matado, es mejor amigo de mi hermana..

Me miro furioso —¿Donde están?

—Uy, eso también me encantaría saber ¿Hacemos equipo?— lo miré emocionada.

—Prefiero trabajar sólo...— le hizo una seña a varios hombres lobo que estaban ahí y enseguida estos le siguieron el pasó.

—No sé cual sea tu concepto de "Sólo" pero ese definitivamente no lo es, así que — lo seguí —mejor hagamos equipo.

Se detuvo repentinamente —Vampiro y hombres lobo— hizo cara de mal gusto —Eso apesta.

—Bueno, algo así, pero sólo imagina sería buena idea, tenemos habilidades diferentes, y juntos ¡Dios!— decía emocionada —¡Sería increíble! ¡Bam! ¡Mordida por aquí y por allá!

—Okey, entendemos, no te emociones.

Me acerqué a el —¿Entonces?

—Vienes. Nosotros vamos a rastrear a Anzel ¿Tienes alguna prenda de él?

—Debería buscar en mi casa, Anzel siempre se queda ahí..

—Okey, Pitter te va acompañar..— un hombre lobo dió un paso al frente hacía nosotros.

—No se preocupen por eso— llegó Ian Tanner —Yo la acompañaré

Lo miré curiosa, pensé que no querían tener nada que ver con los vampiros.

—Bueno, luego nos encontramos..— mencionó la pareja de Anzel.

Odiaba esto, no tener un momento de tranquilidad, sólo preocupación tras preocupación, desde que llegaron los Adamson solo ha sido eso, mientras que antes nuestras preocupaciones eran tan sólo Ian e Iker.

Ian tomó de mi cintura y me encaminó a la orilla del bosque.

Hasta aquí el capitulo ❤️
Pero que aburrido verdad?
Perdonen estuve muy ocupada está semana, y lo sigo estando, pero no quería dejarlos sin Capitulo.