Rescue

1.6K 152 55
                                    

Cuando eres madre, te importa una mierda lo que pase a tu alrededor, lo que diran de ti por que estas sola, lo que piensen cuando cometas un error, un hijo se vuelve tu mundo, y es lo único que importa. Aunque yo no tuviera pensado ser mamá, Ambar ha sido lo mejor que me ha pasado en la vida.

Cuando algo asi te pasa, cuando te quitan a tu niña por un segundo, por tu cabeza pasan todas esas veces que deseaste no haber sido madre, por que aunque suene feo, todas nos hemos sentido asi, ya sea por frustración o enojo con nuestros hijos. Y aunque sea un pensamiento fugaz y te regañes a ti misma por pensar asi, sabes que es verdad y estuvo en tu cabeza, y no quiere decir que no los ames, pero a veces no te sientes suficiente para ellos.

Ambar es mi mundo entero, ella es la luz que ilumina mi existencia, la razón por la que sonrio todo los dias, la amo mas que a mi propia vida.

Daryl se estaciona cerca de la intersección que nos dijeron hace unas horas por mensaje, un callejon oscuro de Atlanta.

Esta a casi nada de amanecer, me duele la cabeza ya que no he dormido nada. Mi estomago esta bastante activo, por los nervios supongo. Ambos bajamos del auto, todo esta sucio y asqueroso. Vamos al final del callejon, mientras Daryl manda un mensaje para avisar que estamos aqui. Giramos y nos colocamos junto a un contenedor vacio.

-Todo saldra bien.- me susurra al guardar el aparato.

Espero que de verdad sea asi. Quiero terminar con esto y tener a mi niña en mis brazos otra vez. Un auto dentro del callejon llama nuestra atención, seguido de otro metros atras. Nos asomamos sigilosamente para alcanzar a ver cuantos son, calculo al menos 10.

-Son muchos.- le digo aterrada.- No voy a poder.-

-Cariño, vas a poder.- me sujeta por los hombros.- Yo los distraere, tu dispararas desde aqui.-

Respiro pesadamente, tratando de que la tensión se vaya, y las ganas de llorar también. Esto es horrible, pero tengo que hacerlo.

Por ella.

-Mierda.- murmura Daryl viendolos aún escondido.

Me asomo un poco abajo de él, el número aumento, deben ser mas de 20. Mis nervios aumentan también.

-Escucha, tratare de golpear a algunos.- dice y claramente se ve nervioso.- trata de darles en la cabeza.-

Daryl sigue hablando, me tiende el arma que a duras penas me ha prestado Rick, la admiro en mis manos. No habia tocado una desde hace años, y sorprendentemente, no la extraño. No la quiero cerca.

Esto no va a funcionar, algo saldra mal y tal vez Ambar sea la que la pague.

-Daryl.- murmuro. Él se acerca a mi.- Te amo.-

Jamas imagine que se lo diria en esta situación, pero tal vez no salga de esta. Quiero que lo sepa, que sepa que él es el or de mi vida y que lo amo.

Sus ojos se abren sorprendidos, sus labios se entreabren dejando escapar un poco de aire. Sus manos acarician levemente mis brazos de arriba a abajo.

-No hagas sonar esto como una despedida Lex.-

-No lo es.- miro unos segundos el suelo.-Solo queria que lo supieras.-

Sus manos suben a mis mejillas, con las mias tomo delicadamente su mentón. Junta nuestros labios en un tierno beso, lleno de amor y ternura. Sus finos labios se mueven lento, y tengo que decir que parace querer tranquilizarme de todo esto.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
All we know || Daryl Dixon ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora