Capitulo 23

502 26 0
                                    




No podía pensar en nada más. El saber que Drew yacía en manos de Christian y sin vida... me destrozaba cada vez más. Ya nada me importaba... ni siquiera Jorge. Por mí y que se vaya al mismísimo infierno si es necesario. Todo esto era... una estupidez, una locura.

¿Será esto real?

No lo sé. No quise abrir mis ojos, no quería abrirlos jamás. Sentí un ligero pinchazo en mi brazo y más sollozos aún. Sabía que era Adam, pero... ¿cómo pudo hacerme esto? Yo... yo confié en él y lo único que hizo fue abusar de esa confianza y llevarme directo a manos de Chris...

¿Cómo lo conocería?

Tampoco lo sé.

-¿Puedes dejar de lloriquear? -ni siquiera se escuchaba mi voz, pero al menos había silencio y eso haría que Adam me escuchara un poco.

-No hables, por favor. Lo lamento tanto Martina, enserio lo lamento y te juro por mi vida que yo no quería pero...

-Ya cállate Adam... es lo mejor que puedes hacer... ¿qué me pusiste?

-A-anestesia, debe de dolerte el estómago - en efecto, sí. Pero eso había desaparecido de mi mente y de mi cuerpo, ya no me importaba que tenían que hacer conmigo.

-No tenías porqué drogarme, da lo mismo si me duele o no. No te importó lo que me hiciste a mí y a Drew, no veo porqué te importa ahora...

-No digas más por favor. Te juro que yo nunca quise y...

-No me importa Adam, ahórrate tus disculpas y regresa por donde viniste - solo deseaba que fuese un sueño y despertarme de una vez por todas... pero no era así. Sabía que no despertaría y agradecería al cielo y a Dios por ser un mal sueño del que había pensado nunca despertar.

¿Por qué me pasó esto a mí? ¿No pudieron elegir a otra persona que solamente no fuera yo? No era mucho pedir... pero, sé que por algo pasan las cosas.

Sentí los labios de Adam rosar y besar mi frente, sabía que era él porque aún seguía llorando. Volvió a decir un lo lamento y escuché sus pasos alejándose lentamente.

¿Ahora qué seguirá?

Jorge

-Es que... esto no puede seguir así, le estoy destrozando el corazón... Caroline, ¿sigues ahí? - las cosas iban de mal en peor, los consejos de la chica, pensándolo bien, estaban mal, pero según ella, lo que estaba haciendo estaba bien- Caroline...

-No te preocupes chiquito, deja ya de inquietarte, todo saldrá bien, ya verás - aunque sonaba bien, era muy diferente el efecto que resultaba en mí aquellas palabras.

-No creo que esté haciendo lo correcto... -me interrumpió la chica.

-Tu solo hazme caso y verás que resultará el plan que tienes... ¿Nos veremos hoy?

Lo pensé dos veces- Sí, pero recuerda que regresaré temprano, temo que esto se vaya de mis manos - bufó en el auricular y suspiró.

-De acuerdo, entonces vente ya, no quiero que me hagas esperar más -colgó repentinamente y yo me volví hacia Martina. Cerré las puertas del balcón y me dirigí hacia la cama. Me senté en el borde y la miré detenidamente. Era hermosa.

-Siento hacerte pasar todo esto amor, pero es por el bien de Drew y el tuyo. No sabes cómo me duele que estés con Adam... pero yo sé que no tengo que decirte que hacer, sé que elegirás bien... te amo - le planté un dulce beso en su frente y salí de la habitación.

Caroline no sabía mi secreto, pero comenzaba a sospechar de mi comportamiento. Las cosas religiosas (sobre todo eso, le fastidiaba a ella), los rechazos a sus señales amorosas, las cizañas por parte de ella hacia Martina, entre más cosas... comenzaban a fastidiarme.

Embarazada De Un Angel - JortiniWhere stories live. Discover now