El Hijo de mi Jardinero. *Gay, Homosexual*

Un Egoísta

Había hablado más a fondo con mis padres, tratando de convencerlos completamente de mi decisión y como esta era la más correcta y coherente. Mamá no comentaba mucho, sólo me miraba como si estuviera tratando de decifrar qué era lo que estaba pensando, yo se que papá estaba de acuerdo conmigo pero insistía por sí cambiaba de opinión, pero eso es lo último que voy a pensar en hacer.

Días después de haber insistido mucho mi padre se rindió y simplemente me ayudó en buscar a donde se supone iba a huir para dejar todo el asunto en el pasado.

Pero había otra cosa.

¿Cómo es que le voy a decir a Esteban que probablemente ya no me volverá a ver en su vida?

Ya se que si me voy puede suceder que hablemos por videollamada pero no creo que sea correcto, me iré por años, él conocerá a gente nueva y yo simplemente ya no quiero estorbar en su vida. Él tiene que ser libre y seguir su futuro sin problemas, sin mí. De verdad lo amo demasiado, no se como es que voy a lograr que esto pase, ¿de verdad puedo dejar ir a una persona a la que amo? ¿Soy tan valiente o muy cobarde por hacer esto? ¿Cómo demonios le diré?

Me odio.

Me odio por haber dejado que Amely pusiera esas cámaras, me odio por haberlo hecho con Esteban, me odio por causar tantos problemas.

Me odio por haber nacido.

Decidí llamar a Amely primero, quizá ella me puede ayudar a decirle a Esteban, yo no soy capaz de hacerlo.

Lo hice, le llamé y ella no tardó mucho en llegar, parecía feliz hasta que vio la expresión en mi rostro, fue entonces cuando ambos nos sentamos y yo me puse a hablar, explicandole todo y diciéndole como es que yo me sentía al respecto y el por qué se lo dije a ella primero antes que a mi novio. Primero se quedo callada y pensante, pensé que se iba a molestar, que comenzaría a gritarme o golpearme, pero no, me sorprendió el ver una silenciosa lágrima recorrer su mejilla y la tristeza inundarle la expresión.

-Luca, no tienes que hacer esto -ella sollozó-. Es mi culpa por haber tenido al menos la idea del video... -la interrumpí y la abracé.

-Tal vez sí es tu culpa, pero no hay nada más que hacer ahora que esto... -le dije, tratando de sonar calmado-. Lo siento, Amely.

Después de eso ella no me respondió, sólo me abrazó con fuerza hasta que se quedó sin lágrimas para llorar. Fue entonces cuando sólo se levantó y se fue, sin aceptar ayudarme en nada, supuse por un momento que estaba tan triste que lo olvidó.

Supongo que de verdad estoy solo.

Me quedé en mi habitación pensando en cómo le iba a decir a Esteban todo. ¿Soy un egoísta? Estoy haciendo esto por su bien y no quiero herirlo pero sé que no le gustará, no le gustará que me aleje y me va a juzgar, aunque yo esté haciendo esto por que lo amo y por que no quiero arruinar su futuro, no quiero arruinar algo por lo que se ha esforzado tanto.

Respiré profundo y dejé de pensar. Me levanté de mi cama y sólo salí de la casa, no me importó que mi cara esté roja por tanto que he llorado, no me importó que mi cabello esté desordenado así como mis pensamientos. Tengo que decirle ahora o no lo haría nunca. Caminé esos dolorosos pasos hacia su puerta y tardé un par de minutos en tocar.

Primero salió Marc, con una cara destrozada. Sólo por un repentino instinto, lo abracé con fuerza al igual que él lo hizo, pude sentirlo sollozar en mi hombro, pero paró al decirle la verdad. Lo único que hizo fue separarse de mí, tomando mis hombros con firmeza y verme directamente a los ojos, él no lo creía.

-Es muy en serio, Marc -le contesté desviando la mirada, estaba apenado y no se por qué-. ¿Puedo hablar con Esteban?

Mi corazón comenzó a palpitar con fuerza cuando me dejó pasar y me dijo que estaba en su habitación. Mis pasos eran pesados y mientras más me acercaba más triste me sentía. Abrí la puerta lentamente y lo vi recostado en su cama, mirando al techo, parecía pensar. La puerta delató mi entrada al chillar y distraerlo de sus pensamientos. Al verme, me sonrió y tuve que sonreirle igual.