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Ya habían pasado alrededor de una hora y media, para eso Louis ya se encontraba haciendo su trabajo, claro hasta que lo llamo Harry.

—¿Me necesitabas?— pregunto el oji-azul entrando a la oficina del rizado.

—Oh si, quería que revisaras unos documentos— dijo Harry concentrado en su celular.

—Claro—

Y el oji-azul se acercó hacía la computadora de su jefe, más no pudo evitar ver lo que su jefe miraba en su celular, pero nunca se espero eso.

Estaba guardando su numero y como nombre le puso: "Princesa"

Y no pudo evitar que se formara en sus labios una hermosa sonrisa.

Checó los documentos que le había indicado el rizado, y al parecer todo estaba bien.

—Están bien Harry— dijo el cobrizo con una sonrisa.

—Supongo que es todo por hoy Louis— le respondió Harry —Es todo por hoy, te puedes retirar—

—Gracias Harry— y salió de la oficina.

El oji-azul guardó sus cosas y fue a su departamento, después de alrededor de 15 minutos llego al edificio.

Estacionó el auto y subió en el elevador hacia su piso.

Se encontró a una de sus vecinas, Lucy.

Ella tenía una gran atracción por el cobrizo, y aunque este le dijera todos los días que era gay, ella seguía sin entender.

—Hola cariño— dijo Lucy envolviendo al cobrizo en un abrazo el cual no respondió.

—Lucy, te eh dicho millones de veces que soy gay, y que no quiero nada contigo— dijo Louis amablemente, sacándose a Lucy de encima.

—Solo una oportunidad, Lou— dijo Lucy rogándole.

—Por favor no empieces— dijo el oji-azul con tono de reproche —Y por favor no me llames Lou— le dijo mirándola a los ojos.

Dicho esto el oji-azul entró en su departamento. Se duchó y se vistió con ropa para dormir, se dirigió a la cocina para cenar un poco de cereal, cuando terminó recogió su plato y limpió un poco, y se fue hacía su cuarto para dormir pero claro, no sin antes mandarle un mensaje a su daddy...

"You look so good in pink" [ls]Where stories live. Discover now