Se ven tan lindos... — murmuró emocionada la omega de ojos azules.

Ya lo se. Siempre supe que terminarían juntos —susurró igual de gustosa que Anne.

No podían evitar emocionarse, el simple hecho de ver a Louis o Harry les parecía lo mejor del mundo. No es que a Jay y Anne les importaran poco sus otros hijos, Hank siempre había sido muy independiente, el alfa se había casado hace unos seis años y Lottie había buscado su beca junto a él en París algunos años atrás; Gemma le había dado a Des y a Anne muchos nietos, era exitosa y enteramente feliz llena de niños. Pero con ellos dos... era el hecho de que Harry y Louis tenían algo especial, desprendían magia por los poros desde el primer día; todo el mundo sabía que habría una gran historia entre ellos.

Y ahora, con toda la familia enterada del pequeño Styles en camino, parecía que un botón dentro de Harry había sido presionado, un botón que se alertaba cuando alguien se acercaba demasiado y entonces el alfa debía intervenir, básicamente cada vez que el enorme lobo interior del rizado detectaba un peligro inminente.

Lo cual era casi siempre y a toda hora.

A los padres de la pareja les parecía gracioso cuando el pequeño omega se empeñaba en que podía ser independiente, todos los sabían de sobra, por su puerto que si. No había razón para negarlo. Cuándo eso sucedía entonces se veía a su pequeño cuerpo ir de un lado para otro siguiendo su rutina diaria con un alfa muy desesperado detrás de él, buscando que sus manos se enredarán en la creciente barriga.

Pero había otras veces en las que por el contrario, se veía a Harry ir de un lado para otro con los quehaceres de la casa, con el objetivo de que el pequeño ojiazul no lo hiciera y al pequeño omega detrás suplicando que regresara a la cama con él. Eran dos lados completamente diferentes pero que se complementaban tan bien... esa pequeña capa de magia que desprendían y la felicidad que irradiaban, hacían pensar a las personas que entre ellos había algo especial, casi utópico.

Lou's Pov

Mayo

Las sábanas olían deliciosamente a lavanda, estaban suaves y calientes.

Ese nuevo suavizante si me gusta. Inhaló satisfecho el omega.

El enorme cuerpo de mi alfa justo detrás del mi me brindaba el calor necesario para sólo cubrirme con una ligera manta.

Eso y que el calor está insoportable a esta hora. Se quejó. No puedo con los bochornos.

Inhale profundo el aroma familiar de mi alfa y abrí ligeramente los ojos, el reloj marcaba las siete menos trece, los pequeños rayos del sol entraban en nuestra habitación cegándome un momento, con un pequeño malestar en el estómago me levanté corriendo al baño a vaciar mi estómago dentro del retrete.

Cómo cada mañana.

El tacto conocido de Harry acarició mi espalda susurrando que me calmara.

Esta bien, amor... Toma un poco de agua — el ardor en mi garganta me hizo soltar pequeñas lágrimas pero la mano amable de Hazz dejando frente a mis ojos una toalla desechable y un vaso con agua que me hicieron llorar de emoción.

Tan atento. Eres el mejor alfa.

Desde hace dos meses que dentro del baño hay una jarra con agua y un vaso para ocasiones como estas.

Tengo una guerra de alfas dentro de mi — tomé el vaso agradecido dándole un enorme trago. Mi boca se sentía seca a pesar del agua y mi lengua conservaba el sabor de lo que ahora yacía en el retrete.

INSECURE [L.S.]Where stories live. Discover now