A thousand years {Michael Clifford FF}. Cancelada.

Capítulo O9: "Bienvenida a Philadelphia."

Narra _____.

Estaba en casa leyendo el libro de la biblioteca, mientras que la música resonaba por la habitación. En el instante que tomé el libro en mis manos pensé en Michael, en sus ojos, su sonrisa, su forma de hablar, su acento, sus labios: Prácticamente su todo, su forma de ser, raro, misterioso, fuera de lo que era la vida en donde vivía antes. 

Mi celular empezó a sonar, miré en la pantalla: “Annie”

- ¿Mamá? 

- Hola hija ¿Cómo has estado? 

- Bien, ¿tú? 

- ¿Te sucede algo? 

- No… -Suspiré- Solo estaba pensando 

- ¿En qué o quién? –Rió-

- Estaba leyendo un libro para… historia 

- ¡______! Soy tu madre, cariño, cuéntame. 

- Hay un chico… 

- ¿Un chico? ¡Por dios! ¿Hablas en serio? –Gritó emocionada-

- ¿De qué te emocionas, mamá? –Dije mordiendo el interior de mi mejilla-

- De que por fin te enamoras.

- Oye, estaba pensando en alguien, no estoy enamorada de él.

- Oh, ____, ya te enamorarás.

- Apenas he intercambiado algunas palabras con él, no lo conozco.

- Me imagino tu cara de enamorada –Dijo, ignorando lo que yo le dije-.

Corté la llamada. Ella me llamaría de nuevo, lo sé. Esperé unos dos minutos y sonó el celular de nuevo. 

- _____, ¿Por qué me cortaste? 

- Estabas molestándome, mamá.

- Lo siento pero, me emociona que… -La interrumpí-.

- Ya, olvidémoslo. ¿Vale? 

- Vamos, háblame de él.

- Mamá tengo que irme.

- _____, va… 

- Tengo que irme, te quiero, adiós. 

-Bufó- Yo también te quiero, adiós.

Apagué el teléfono y lo tiré a la cama, tomé una fuerte respiración. Eran las siete y media de la noche, había pasado toda la tarde, desde que llegué del Instituto, en mi habitación. 

- ¿_____, estas despierta? –Alguien, supuse que mi padre estaba tocando la puerta-.

- Sí.

- ¿Puedo pasar? 

- Sí, pasa –Dije mientras tomaba un cuaderno para empezar a escribir cualquier cosa-.

- Vamos a salir a comer ¿Vienes? 

- ¿Quiénes? –Pregunté- 

- Ven conmigo un segundo –Se dio media vuelta-.

Me paré de la cama. Agarré mi celular; lo metí en el bolsillo de la parte trasera de mi jean. Al terminar de pasar por la puerta, la cerré. Bajé las escaleras mientras escuchaba las voces de unas personas en la sala. 

- _____, ¿Te acuerdas de Bill? –Señaló a un hombre parado junto a él- 

- Claro que lo hago –Sonreí- Hola Bill.

- Hola _____ -Se acercó a mí y me abrazó- ¿Cómo has estado? 

- Muy bien y ¿Tú? 

- Bien, gracias.