Mejor vida

¡Hazlo! te van a criticar igual

Esta expresión llamó mucho mi atención. ¿En qué nos estamos convirtiendo? ¿Cómo es eso que ahora es "normal" criticar a los demás? Es lamentable, todos hemos caído en este error alguna vez y lo más doloroso es que todos hemos sido víctimas de este mismo error muchas veces.

Según el diccionario, el concepto de criticar se resume en: conjunto de opiniones o JUICIOS; surge otra pregunta: ¿Quién nos da el 'rango' para sentirnos con la potestad de juzgar acerca de lo bien o mal que hacen otros? Nadie; pero somos muy buenos para asumir posiciones que NO nos corresponden.

Otra característica de las críticas es que, por lo general, son a espaldas de la persona, pocos son valientes para decir sus "opiniones o juicios" directamente a alguien en particular. Seguramente algunos dirán que existen las famosas "críticas constructivas", ¡JA! Vamos a estar claros, esa es una manera 'educada' de decir: "Te voy a ofender amablemente, así que no te molestes".
A mi parecer, válido es el término: Recomendar o aconsejar, porque ambas palabras por sí solas reflejan preocupación por ver crecer a alguien. Pero la palabra "crítica" ya causa predisposición al escucharla.

Este mensaje es para 2 tipos de personas:
1. Los que aman criticar: ¡Con la misma vara que miden, serán medidos! Nadie te dio potestad para juzgar a otros porque no eres más ni mejor que nadie, así que ubíquese. Léete Lucas 6:37-48, respira y reflexiona.
2. Los criticados: ¡Pa' lante! ¡Hazlo! ¡Haz eso que tanto te apasiona, no te desanimes! No le des el gusto a la gente, enfócate en agradar a Dios, recuerda que Él envió a su hijo justamente en muestra de misericordia, porque si Dios que es el ÚNICO que puede juzgarnos lo hiciera, más de uno no existiera.

¡Seamos diferentes! Demos palabra de aliento, de ánimo, enfoquemos la atención en lo positivo de las personas, todos tienen algo bueno que enseñar, seamos colaboradores de la alegría de los demás, ya basta de ver sólo lo malo, reconozcamos el esfuerzo de otros y vamos a animarnos. A todos nos gusta escuchar: ¡Sigue adelante, lo estás haciendo bien! Dilo y harás sonreír a alguien.