13. Mejorando de a poco.

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Lo que vino después de eso fue muy raro. No estamos pololeando, tampoco somos nada. Estamos como pinchando. O sea, es mi andante.

Si, es bien weon, porque fuimos pololos antes y ahora ser andantes es como raro porque pasamos de todo a nada en un paso.

Unos días después me pidió que por favor hablara con la Arlett para aclarar las cosas, pero ella no quería verme. Yo también quería hablar con ella urgente, le pedí ayuda al Julián porque ella también esta enojada con él, pero él si se atreve a hablarle el clases. Por otro lado la Génesis nos está haciendo la ley del hielo a los cuatro y para más remate se esta juntando con la Moira.

Máxima traición.

Mentira, pero igual como que me molesta, porque se que habla cosas malas de mi a mis espaldas. Pero sé que por más enojadas que estén las chiquillas no le creerán. Confío en ellas.

Le conté a mi mamá y a mi papá que estaba pinchando con el Ignacio. Mi mamá no hizo tanto drama pero mi papa... él era otro cuento. Literalmente pegó el grito en el cielo.

Flashback

— Hija, dime que me estai weando — me dijo serio. Estábamos en el sofá hablando los tres, junto a mi mamá

— ¡No seas así! — mi mamá le dio un codazo — La Gabriela es grande, tiene 17 y supongo que sabe lo que hace. Me molesta lo que le hizo, pero ella sabe lo que hace y yo la voy a apoyar, independiente si llega otra vez con el corazón roto. Tu deberías hacer lo mismo.

— Está bien, pero si el weon  vuelve a hacerte algo va a terminar con un ojo menos el conchesumare — me dijo serio y me rei.

— Ya papá. ¿Entendiste Ignacio? — dije acercándome el teléfono un poco para que se escuchara — Vas a quedar tuerto — volví a reír y mandé mi nota de voz.

Fin Flashback.

Ahora estaba acostada en una colchoneta esperando a que el Fabian y el Ignacio se dignaran a llegar con las demás cosas que faltaban como los aros, las mancuernas, las vallas, los conos, etc. Se supone que como no hago educación física yo debería estar buscando las cosas pero hicimos una apuesta y gané, y esa era parte de su penitencia.

— Oh que hace calor en la bodega weon, ¿Gabi cómo no estai caga de calor con el buso? — me preguntó el Fabian cuando llegó.

— Es que no me he movido, y eso no es na. Cuando los pongan a hacer el circuito ahí si que no vas a querer más calor — me reí— Y yo voy a tomar el tiempo, así que es como si fuera una tirana — me paré de la colchoneta y me arreglé la ropa.

— ¡Gabi! — me llamó la profe — En la sala de profes en mi casillero está mi parlante, traelo por favor. Para que los chiquillos no se aburran tanto — me dijo y me pasó la llave de su casillero. Puta weon, igual voy a tener que subir las escaleras.

Iba subiendo mientras veía como los ponían a correr y me cagaba de la risa con lo pajero que podían llegar a ser algunos de mis compañeros. En el camino me encontré con la Moira que venía saliendo del camarin pero como buena perra fabulosa que soy la ignoré. Mentira, ignoren lo de "perra fabulosa" solo quería sonar bacan pero terminé sonando como weona. Grande Gabi, siempre triunfando.

La wea es que la ignoré y seguí caminando hasta la sala de profes donde entré pidiendole permiso a la secretaria y caminé derechito a el casillero de la profe.

— Vengo a invadirlos un poco, permiso — les dije a los profes que estaban ahí y algunos rieron. Estaba abriendo el casillero cuando entró el Jefe de Unidad Técnica Pedagógica, o jefe de UTP, o el profe Rodrigo, como yo le decía. Venía acompañado de...

C O N C H E T U M A R E.

EL WEON RICO WEÓN.

Ya Gabi, relaja las hormonas.

— Colegas, él es Gabriel. Desde hoy viene como reemplazo de la profesora de lenguaje que como sabrán está con pre-natal — informó y me miró— Oh, hola Gabriela — me saludó.

— H-hola profe — lo saludé media nerviosa.

— Ella va a ser una de las alumnas de los cursos que vas a tomar — le dijo al profe nuevo y me sonrió. No se como chucha no se me cayó el parlante ahí mismo weon, era muy lindo.

— Con permiso, un gusto — le dije antes de salir de ahí casi corriendo.

[...]

Toqué el silbato, eso significaba un minuto de trabajo por estación. Los flojos culiaos que tengo como compañeros empezaron a trabajar luego de treinta segundos de descanso.

Me encanta tener el control conchetumare, es como "Trabajen para mi esclavos".

Terminaron de hacer los ejercicios de cada circuito y se fueron a cambiar ropa quince minutos antes de que tocaran porque tenían que bañarse los cochinos culiaos. Ayudé a la profe a guardar las cosas en la bodega y subí a la sala. Allá volví a cruzarme con la Moira que me miró feo.

Pendeja culia.

O sea, que onda. Ella tenía que superar que el Ignacio no la pescaba. No lo digo porque el Ignacio ahora estuviera conmigo ahora, pero como el me había dicho ya eramos bastante grandes como para afrontar y superar problemas. Yo creo que si ella no hubiera tenido esa actitud hacia mi el primer día las cosas hubieran sido diferentes.

Además eso de pelarme con mis mejores amigas lo encuentro bien de cabra chica de diez años. La Arlett era MI mejor amiga y estoy segura que no le va a creer nada a la weona ridícula de la Moira.

— ¡MAYDAY MAYDAY! — escuché que gritaban. Me di la vuelta y venían los dos aweonaos, el Fabi corriendo con el Ignacio subido en upa sobre él por el pasillo.

— Par de weones cállense que los otros cursos están en clases— los reté cuando llegaron a mi lado.

— Ay tan pesada— el Ignacio se bajó y me abrazó — Te veías re entretenida haciéndonos sufrir allá abajo, ¿Te gusta verme sufrir eh?

— Si, me gusta — le sonreí— Y más si es por mi po.

— No me dejen tocando el violín ahora po, que me duele en mi frío y pobre corazón — bromeó el Fabian.

— ¡ELLLLLA! — le dijimos con el Ignacio exageradamente.

— Cállense que hay otros cursos en clases — me imitó el Fabian con voz chillona.

— Oye que wea te pasa, yo no hablo así aweonao — le pegué un zape — ¿O no Ignacio? — lo miré.

— Eeeh... — miró al Fabian y se aguantó la risa. Este conchesumadre...

— Ya weon, andamos con esa — lo miré feo y seguí caminando a la sala, pero a los segundos ya lo tenía encima llenándome la cara de besos y baba, mucha baba.

— ¡Ignacio! — me puse a reír — Voy a quedar pasa a baba tuya weon, sale — lo empecé a empujar mientras reía.

Definitivamente las cosas iban mejorando y, espero que nadie más las arruine.

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Holi, como andan? 🙊
Lo que les dije sobre recomendarme canciones iba en serio. Pueden recomendarme cualquiera, escucho de todo 👌🏻

¿Qué creen que pase con el profe? 👀

Eso, si les gustó muchas gracias y si no mis amores, saben que están invitadas a chupar el pico 🙊💓

-Javivi.

Weona yeta 2: Yetecidad al doble.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora