FEAR & LOATHING

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Encontrado en el manto azul. Como si fuera una especie de pastizal, caminé torpemente, aunque no tuviera un camino. Porque me encontraba solo y quería buscar compañía.

No sé quien soy.

Y creo que nisiquiera sabré. Porque lo he vivido todo.

Aunque el lugar en el que me encontraba no tuviera forma y pareciera más que me encontraba en una especie de vacío, me retorcí y opté una posición fetal. Con pena y tristeza cubrí mi nuca y entrelacé mis dedos, para asegurar que esa cadena me cubriera, lo suficiente para disminuir mi dolor.

Me he encontrado en tantas situaciones, en diferentes personalidades y ninguna me quedaba. Ya esta era la última de todas las vencidas. Y me he llenado de tristeza. Porque aún, todavía no he comprendido.

Ahora lo veo; y como si fuera la primera vez, me le acerco de nuevo, con una confianza. Le abrazo. Y no me siento pecaminoso, ni en pecado, porque en sus brazos para mi y él no existe pecado, ni juicio.

No es ningún crimen ser amable.

Ahora todos me culpan. Y nadie me entiende

Tal vez, solo ellos, tal vez. Solo quieren conocerte.

Empecé a llorar y él, al contrario, me secó las lágrimas y me besó, porque nadie lo hacía. Ese manto azul; como proyector, me mostró las estrellas. Alzamos la cabeza juntos y me dijo que era el momento.

No necesitas vivir tu vida en miedo y odio.

Era tan claro. Las estrellas se volvían polvo y retornaban a su estado actual. Me sentí por primera vez, libre de miedo. Era todo tan hermoso

Ya no quiero vivir el miedo y el odio, pero ¿Cómo puedo hacerle?.

Me aferré a su torso y brazos, envolviéndolo y quitando la vista de las estrellas. Él volteó y señalo con su cabeza, entrecerrando los ojos. Salió de ese proyector mis peores emociones y las más vergonzosas escenas de mi vida. Sentí rubor que subió a mi cabeza y mi estomago comenzó a sentir mariposas.

El miedo y el odio.

EL MIEDO Y EL ODIO

Comenzó a salir la gente que más amaba y la que creía que no me correspondía. Las veces que me han dañado, se mostraron equitativas a las veces que dañe.

Hay tantas personas metidas en tu cabeza y te preguntas cuál de todas ellas te aman. (Me pregunto, cuantas me aman)

Estoy cansado de intentarlo todo y terminar sin hacer mucho.

Volví a llorar y esta vez mis piernas se debilitaron. Levantó mi cabeza y me volvió a besar.

Ya no quiero vivir el odio y el miedo. Pero ¿Cómo puedo hacerle?

Esta vez, las imágenes las tenía yo y solo mi cabeza fue la que ardió. Avergonzado, me oculté en su pecho.
Estrujo mi brazo ligeramente y dijo.

Cuando el tiempo llegue y mi luz se vaya. Sabré a donde pertenezco.
Y cuando me pudriré.

Al escuchar esas palabras me precipité, alejé mi cabeza de su pecho y me percaté de que su cuello comenzaba a agrietarse. Una grieta tan fina como un hilo, comenzaba a surgir de la parte de su vena yugular. Asustado me volví a acurrucar en su pecho.

De Repente esa escena volvió a salir. Como si regresara de la muerte o mi cabeza proyectara los recuerdos de nuevo. Y me volví a encontrar en ese lugar.

No quiero vivir miedo. No quiero vivir odio.

Y apareció levitando. Mirándome como la última vez. Se recreó todo.

Comencé a gritar y esta vez lo comprendía. Pero mi corazón es terco y seguía gritándole, esta vez pidiéndole, que no muriera.

NO ENTIENDO LO QUE ESTAS DICIENDO.

Miraba horrorizado, porque me encontraba en dos lugares. Observaba junto con él la escena, pero también cometía su asesinato.

Y deseé.

No quiero pesar.

Me despegué de su torso, sin soltarle los brazos y tuve la sensación de levitar. Estaba en el vacío, pero esta vez sentía en mi pecho, en mi cabeza, piernas, brazos e incluso puedo jurar que en mis órganos, ligereza.

Una luz pareció y sentí que me separaba de él.

Ya no tengo miedo...

Sentía como dos imanes. Nos habíamos vuelto opuestos y forzadamente comencé a sentir que nos separábamos. Aún no le soltaba los brazos y me aferré más.

Quiero tocar el borde de la grandeza.

Yo sentía un gran placer, pero su cara mostraba tanto miedo. Ese sentimiento de correspondencia entre los dos, desde el primer día, se había esfumado.

La escena cambió. Los maté a todos.

No quiero vivir sin esperanzas. Sin esperanzas...

No pude dejar de aferrarme. Era su momento de ir y tenía miedo. Comencé a llorar.

Y cuando el tiempo llegue.

Me separó de su pecho forzadamente.

Y las luces se vayan

Su muerte.

Cuando el tiempo llegue

La grieta que traía en su cabeza, se rompió, apunto de su ida.

Las luces se vayan

Había ocurrido otra vez. Lo había vuelto a ocasionar. Como siempre y otra vez. Yo había dañado y ellos no tenían la culpa. Yo lo había deseado y él no merecía mi culpa. Aterricé de mi estado actual, tome su cabeza y le besé.

Freude!
Freude!
Freude, schöner Götterfunken
Tochter aus Elysium,
Wir betreten feuertrunken,
Himmlische, dein Heiligtum!

Fear & Loathing [Kawoshin] One-ShotNơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ