EL AUTOBÚS [CAMREN FIC]

SHOT

Lauren era una chica muy famosa por su excelente desempeño con la cámara, en realidad ella era una clave importante de la empresa en la que había invertido dinero y tanto esfuerzo. Sus fotos eran la sensación, por ello era una mujer ocupada.

Una mañana lluviosa y fría en el autobús que frecuentaba de camino a su empresa, Jauregui Photography INC. donde iniciaría un nuevo día en el trabajo que tanto amaba, se encontraba Lauren, esta vestía de un traje semi-formal, un suéter de cuello alto de color negro, con botínes, una falda cuatro dedos encíma la rodilla negra también y una chaqueta ceñida al cuerpo gris, un leve maquillaje y sus ojos delineados delicada y sutílmente le daban el outfit ideal. Lucía hermosa.

Empezó a revisar su Twitter pues tenía una especie de fans que le escribían, ya fuese saludandole ,felicitandole, o deseandole un buen día entre otras. Lauren levantó su mirada y la fijo sin razón alguna en esa chica que estaba buscando un puesto vacío.

"Ella ... es hermosa"

LAUREN POV

-Ella .... es hermosa-. Pensé inmediatamente.

No había nada más que hubiese acaparado mi atención por completo que su prescencia inminente, ¿como es que nadie pudo notarlo? Al menos a mí me había cautivado.

Camila al darse cuenta que no habían sillas libres dió un leve vistazo al autobús en la parte de el conductor y luego al final, dirigió la mirada hacía el último puesto del autobús en la esquina, vío a Lauren. Se fue hasta ella.

-¡P...por... Por Di.. os!-. Tartamudeé mentalmente cuando la ví trazar su camino hasta el punto donde me encontraba sentada.-No puede ser cierto, ella está viniendo hacia mí, que no se pare aquí por favor... ¡POR FAVOR!- Rogué y de inmediato sentí nervios, ella llegó hasta mí, parándose en frente, tomó la baranda de agarre que estaba casí encima de mi cabeza con las dos manos, llevaba una linda perla blanca como anilloy se había agarrado justo a tiempo para que el autobús arrancara.

Ella estaba en frente mío y yo simplemente no podía creerlo, tenía a la más bella de las musas, la que me había hecho alucinar desde que entró a este autobús y yo siemplemente no paraba de verla, vestía con un pantalón blanco pegado al cuerpo el cual le daba un toque perfecto a sus tonificadas piernas y una playera olgada de color rosa. Ella soltó una mano del agarre poniendose de lado y acomodó un mechón rebelde trás su oreja, dejando así el aroma impregnado de su perfume en el aire, en mí. El aroma era inexplicable, un delicioso toque de jazmín con vainilla, además había observado atentamente ese enorme culo que tenía de perfil, era lo mejor que veía y no tenía.

...Me tenté.

Ví la figúra de sus carnosos labios rosa que solo tarareaban la canción que escuchaba, se dejó llevar entrecerrando sus ojos, ya inspirada en la pasión que estaba viviendo, empezó a marcar con su cabeza suavemente el ritmo de la que parecía la melodía, cerró por completo sus ojos, había encontrado su nirvana. Levantó lentamente su cabeza, tranquila y una vez en alto supiró. Había sido el mejor orgasmo musical que halla presenciado en mi vida. Ví como abría sus ojos tranquilamente.

Me miró.

Apenas sus ojos hicieron contacto con los míos me dí cuenta que era el marrón más lindo en el que puedes perderte. No eran azules pero podía ver el cielo en ellos. Por primera vez sentí mariposas en mi estómago.

Después de un segundo ella apartó sus orbes marrónes de mí. Agradecí mentalmente pues no hubiera podido sotenerle la mirada por más tiempo, todo esto me había dejado extaciada.

Yo no dejaba de observar cada minusioso movimiento que hacía, al parecer la canción era muy buena. La disfrutaba.

Luego ví como empezó a golpear levemente el suelo del autobús, ella volvío a apagar las bellas estrellas que tenía de ojos. Nuevamente se había ido.

Admiraba la melodía que se esmeraba en hacer al golpear. Giró su cabeza en dirección a mí y pude sentir que me veía atraves de sus parpados, me sentí invadida, pero no de mal forma y empecé a acomodar mi cabello, muy nerviosa, le dí un vistazo a mis uñas y volví la mirada.

Ella estaba mirandome.

Esta vez intenté ser fuerte pues no podía dejarme ganar de esa forma, me intimidaba pero tampoco podía dejarselo saber tan fácil.... Le sostuve la mirada tanto como pude, casi fue una eternidad. Sentí un cosquilleo en mi espalda al ver que la pequeña comisura de su labio se había encorbado, me estaba sonriendo.

Le devolví la sonrisa.

No habían palabras para describir todo lo que sentia coon sus miradas, con su sonrisa, el sentimiento que tenía era bastante especial, me sentía completamente inexperta en todo lo que estaba sucediendo dentro de mí. ¿amor a primera vista?... ¿Por que no?

Ella no dejaba de mirarme con esa sonrisa tan hermosa. Y mientras lo hacía entró un pequeño soplo de viento que desacomodó el mechón que antes había fijado. Ella curvó sus ojos y apreció con atención el cabello que tenía en medio de su frente. Sonrió aún más, entrecerrando un poco sus ojos y asomando la punta de la lengua entre sus dientes.

Me enamoraba lo que veía. Ella era poesía.

Instintivamente arregle mi cabello y lamí mis labios. Era mucha presión. Tanta intensidad me tenía seca.

Ella giró la cabeza en dirección hacia la ventana y abrió los ojos de manera pausada apreciando la vista. Un vecindario mojado fue lo único a lo que prestó atención antes de que el bus parara.

Lo último que ví fueron sus manos acurrucadas alrededor de su boca las cuales les daba un soplo de calor recién exhalado, frotando sus manos intentando darse un buen ambiente.

Por un momento envidié sus manos, ella tenía frío.

No le ofrecí mi chaqueta porque la ví desaparecer por la puerta de salida en aquel autobus.

~Fin~