Tú me Perteneces a Mí... ¡Solo a Mí! |BTS| ©

Capítulo #7

Ya ha pasado más de dos semanas de lo ocurrido y me siento algo rara, pero feliz, he dado vuelta la página. Lucy es una compañera genial, ¿por qué no estuve con ella antes?

—Mirna, hace días que no vemos a los chicos, así que arreglé con ellos para que vengan. Pero no vendrán todos, Jungkook, Namjoon y J-Hope se quedarán, no sé porqué pero bueno. Seguro para jugar en la computadora.

—¿T-Tae vendrá?

—Obvio —pone una expresión y tono de voz obvia—. Estás avanzando mucho con Tae, deberían salir un día, en una cita.

—No sé —me sonrojo—. No sé manejar una cita, y soy inexperta en ese tipo de cosas.

—Todo estará bien, solo sé tú misma, y no te avergüences o estés tímida, ten más confianza en ti; créeme que no sucederá nada.

—¿Y si no va nada bien?

—Puedes enviarme mensajes y yo te ayudaré. Estoy a tu servicio —hace una reverencia y me río con timidez.

—¿Entonces Suga y Tae estarán juntos aquí?

—¿Sucede algo con ellos?

—Suga me va a incomodar, Tae y yo tenemos sentimientos mutuos y él se va a entrometer.

—¡Lo echo de la casa! —río cuando dijo eso.

—Lo siento por Suga, pero yo no siento
nada por él.

—Pobre Suga... pero no importa. Si intenta meterse en tu «amistad» con Tae yo lo detendré.

—Vale —le dedico una pequeña sonrisa—. ¿Y Jin es como Suga?

—¡Al contrario! Es un amor de persona.

—También estaré incómoda con él...

—No te sientas incómoda al frente de nadie, no te van a juzgar. Además yo estaré por si necesitas ayuda —me sonríe y le devuelvo la sonrisa.

—Gracias... por todo —sonrío con sinceridad.

—Para eso están los amigos —me sonríe ampliamente—. Pero lo de la cita con Tae improvisa sin mi ayuda —reímos.

Un rato más tarde...

—¡Atrapala! —le paso la pelota de fútbol a Lucy.

—¡Buena patada! —ríe Lucy al detener la pelota—. ¡Chicos! —exclama al ver al grupo de amigos acercándose hacia aquí.

Me doy la vuelta instintivamente y los chicos estaban entrando, hice contacto visual con Tae y quedé perdida en su mirada. De la nada siento un golpe seco en mi cabeza, fue tan fuerte que me marié y caí al verde pasto. Se puso todo en negro, pasé del paraíso a la nada.

—¡Hey, Mirna! ¡Mirna! —escuché la voz de Lucy y varias manos me sacudían para despertarme.

—Qué... —abro mis ojos perdidos—, ¿qué pasó?

—¡Perdóname! No fue mi intención darte un pelotazo —dice Lucy muy indignada.

—Ay... —me siento en el pasto tocándome la zona donde fui golpeada.

—¿Te duele?

—No, ¿cómo se te puede ocurrir? —le respondo sarcásticamente.

—Ven, te vamos a dar un poco de hielo —comenta Tae terminando de levantarse para darme la mano.

—Gracias —digo cuando acepto la mano de Tae para pararme.

Hemos entrado a la casa y me pongo hielo en la cabeza, el dolor fue desapareciendo de a poco, pero siempre había un poquito de punzadas ahí.

—¿Estás mejor? —me pregunta Tae.

—Sí —respondí y me quito el trapo con hielo—. Ya estoy mejor —le sonrío.

—Me alegro —me devuelve la sonrisa y nos quedamos viendo un rato con atracción.

—¡Aquí hay onda! —se mete Jimin.

—Cállate Jimin —le contesta Suga seco.

—¿Por qué devería hacerlo? Se nota a kilómetros, ¿o tienes un pequeño problema? —Suga mira a otro lado ignorándolo—. Ohh, ya veo —levanta las cejas de arriba a abajo.

—¿Que ves qué? —pregunta Lucy—. Ahh, sí claro… ya sé qué ves.

—¿Huh? ¿de qué hablan? —pregunto demasiado confundida.

—Tanto como Suga y Jin —seguía hablando Lucy ignorándome.

—¿Que yo qué? —se sonroja Jin.

—Ohh —expresa Jimin sorprendido y entusiasmado—. ¡No lo puedo creer! —se tapa el rostro con una mano para no reír.

—No me molesten o me voy —dice Suga entre dientes.

—¡Chicos! ¿de que cojones hablan? —pregunto desesperada.

—Oh, nada, nada —dice Jimin con sarcasmo y mirando a Suga y Jin burlonamente.

—Que Suga está celoso —dice Lucy entre risas.

—¡Yo no estoy celoso de nadie! —se ruboriza Suga.

—Admítelo, no será el fin del mundo —le aconseja Jimin. Suga solo suspira para no perder la paciencia.

—¿Celoso? ¿de qué? —pregunta Tae marcando el «qué».

—De tu agarre con Mirna —dice Lucy incrédula.

—Ya basta —comenta Suga poniéndose mal—. No sigan más. Por favor, déjenme solo.

—Bueno, lo siento, lo siento —Lucy levanta las manos inocentemente.

—Todos lo admitimos Suga, es linda, y no es nada anormal pensar eso —dice Jimin.

—… ¡pongamos una película! Mientras buscan, haré palomitas —se ofrece Lucy.

—Buena idea —respondo.

Luego de haber escogido la película en la TV y que Lucy haga las palomitas, nos sentamos todos juntos en el sillón, Tae apoyando su brazo en mi hombro en la izquierda, y Jimin en la derecha.

—¡«50 Sombras de Grey»! —grita Lucy, los demás solo abucheamos.

—Que asco de película. Por Dios, Lucy —le contesto.

—¡¿Es enserio?! —bufea Tae.

—Por favor dime que no —dice Jimin.

—No se quejen y disfruten —se sienta Lucy y la película empieza.

En las próximas 2 horas desperdicio tiempo para nada, solo me limito a comerme las palomitas, incluso tengo más acción que la película, pues cuando estoy escogiendo palomitas Jin lo hizo al mismo tiempo chocándonos las manos. Ambos nos miramos y nos sonrojamos, yo esbozo una sonrisa tímida y saco con rapidez mi mano con las palomitas, desvío mi mirada de la de él y comienzo a comermelas como si nada pasó.
　La película se está poniendo «caliente» y me siento algo incómoda mientras Tae se apoya en mí. Miro a Tae y él me imita, bajo la mirada hacia sus labios y me vuelvo a sonrojar, se acerca y nos damos un cálido beso. Tengo la sensación de varios pares de ojos mirándome, me separo de Tae y era verdad, todos nos están mirando incrédulos, menos Lucy que ya nos vió hacerlo. Ambos nos sonrojamos.

—Sigan viendo la película, por favor —río nerviosa. Para mi sorpresa, lo hacen, solo que Jin y Suga con otra expresión.

Ya hemos visto la mitad de la película, todo va bien, hasta que siento que alguien pone su mano en mi entrepierna y la acaricia, creo que es la de Tae; pero quedo sorprendida al saber que era la mano de Jimin.

~

ola k ase :v