·Parte única·

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-¡No me creo que ese pequeño cabrón se nos haya escapado de nuevo!-el oficial de pelo negro resoplaba amargamente mientras estampaba con rabia sus delgadas piernas contra el escritorio de vidrio, sus compañeros, quienes se sentían igual de impotentes que él, bajaron la mirada.

-Esta vez no iba solo-aclaró Namjoon bajando su vista hasta posarla en aquel informe que tenía entre las manos, leyéndolo en voz baja de nuevo a pesar de que ya prácticamente se lo sabía de memoria, para asegurarse que su información era correcta.

Siempre era el mismo patrón, pensaba el agente Jungkook, el mismo maldito chico siempre conseguía burlar de alguna manera todas las medidas de seguridad del lugar y llevar a cabo sus fechorías, llegando con éxito hasta sus objetivos y pintarrajeándolos con spray tanto como quería para después marcharse, dejando su firma: Chimx2 en su ''obra de arte''.

-Es imposible que se nos escape tantas veces, algo estamos haciendo mal-se quejó el castaño cansado de tanto fracaso, su espíritu competitivo no le permitía perder tan reiteradamente contra el vándalo de pelo rubio, no conocía su cara, puesto que siempre llevaba un pañuelo negro tapando todo su rostro excepto aquellos pequeños ojos que se burlaban de él y de sus compañeros cada vez que los veía acercarse, pero lo que sí sabía era que lo atraparía, cumpliría con su trabajo de agente de policía y volvería a restaurar el orden en la ciudad.

Que inspirador todo.

-No me digas, Jeon-se carcajeó Yoongi, mirando al menor con ironía- Pues si tienes alguna aportación que hacer, adelante, te escuchamos.

-Podríamos tenderle una trampa-propuso mientras se acomodaba en su silla, cruzando ambas piernas sobre su regazo, levantó una ceja orgulloso acompañado de una confiada sonrisa-Proporcionarle un objetivo que le sea imposible rechazar.

-¿Algo que le sea imposible rechazar a un grafitero?

-Un edificio recién inaugurado-sonrió Hoseok ante la idea-El lienzo perfecto.

-La inauguración del nuevo edificio Woon es una buena propuesta-Namjoon alzó la cabeza con decisión, clavando la mirada en el grupo de policías, en la habitación reinó el silencio, todo el mundo esperaba la aprobación de Yoongi antes de dar siquiera su opinión, ya que, si el mencionado se negaba, aquello iba a misa.

-¿Sabéis que nos estamos arriesgando mucho, no?-preguntó el pelinegro-Si la cagamos y el Chum éste acaba estropeando el edificio nuevo, el jefazo nos cortará los huevos a todos... pero eh, adelante, vamos a intentarlo, si caigo yo, os arrastraré conmigo. Ya estoy viejo para estas cosas.

-Se llama Chim-le corrigió el agente Hoseok entre risas, dándole un golpe suave en el hombro a su superior.

-Chim, Chum, lo que sea, vaya nombre de mierda se ha buscado-bufó rodando los ojos.

Todos los agentes sonrieron divertidos en el despacho donde se encontraban, Yoongi tenía una personalidad tan especial que los encandilaba a todos y los hacía caer en su juego sin apenas esfuerzo, tenía un don nato de líder aún que él lo negara cada vez que algún agente le sacaba el tema, podía aparentar ser un vago que le encargaba todo su papeleo al pobre de su secretario Namjoon –que lo hacía- pero tanto para Jeon Jungkook como para todo el resto de la comisaría él siempre sería un ejemplo a seguir, aún que ninguno lo admitiera en voz alta.

Dando por acabada la reunión, todos los agentes se dispersaron y volvieron a sus respectivos sitios, sin embargo, Jungkook fue detenido por su superior y el secretario de éste, haciendo que se sentase delante de estos dos en una de las mullidas sillas del despacho del oficial.

-Ya que has tenido la genial idea para atrapar a ese cabrón, es justo que te quedes a ayudarnos a montar el plan-explicó Yoongi a su pequeño subordinado, poniéndose detrás de él y palmeándole los hombros como muestra de cariño.

·Arrested· [Kookmin-OneShot] {Lemon}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora