EXTRA N° 2: Daichi.

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"Aún me acuerdo cuando Nowaki y yo adoptamos a Daichi, era un niño encantador y tranquilo..."

"Era"

"Hasta que llegamos a casa"

-¡Hey! ¡Bájate de ahí!

Toma de la cintura al niño y lo baja de la mesa, en esta se encontraban varios tarros de pintura y brochas.

-Oh, papa...-Hizo un puchero-Quiero ayudar a Otou-san.

-Lo sé, lo sé, pero en esas ropas no, ve a cambiarte y ponte esto-Le da un overol que tenía colgado en el perchero.

-Gracias papa-Sonríe y se va corriendo fuera de la casa.

-¡Y ten cuidado!

-¡Haaai!

Mientras que Hiroki preparaba el almuerzo, cierto niño de seis años salía al patio a ver lo que hacía su otro "padre".

Nowaki estaba colocando los últimos ladrillos y encima cemento, para terminar las paredes y el techo de la habitación para su hijo adoptivo.

-¡Otou-san!

El peliazul levantó la mirada para toparse con un pelinegro de ojos turquesa.

-Daichi-kun ¿Y ese overol?-Sonrió mientras que seguía con su labor.

-Papa me lo dió, quiero ayudar.

-Bueno, si me quieres ayudar puedes tomar esa brocha-Le señala una que estaba dentro de una cubeta-Y mezclas la pintura con un poco de agua, que no sea ni tan espeso ni tan líquido, cuidado te manches la cara.

-¡Hai!

-En la cocina-

-Misaki, ya vi tu postal...sí, me gustó como sales con Akihiko, se te nota muy felíz.

El castaño estaba hablando con su amigo el ojiesmeralda por teléfono, habían pasado meses desde que Misaki y Akihiko se fueron a vivir a Inglaterra.

Se puso el teléfono al hombro mientras corta las verduras.
-Daichi se la para saltando por aquí y por allá, es bien hiperactivo...ah, está ayudando a Nowaki con...

En eso se escucha como un derrumbe afuera de la casa.

-¿¡ARE!? ah, n-nada Misaki, te llamo después...nos vemos.

Cuelga y deja las verduras picadas en una olla, se limpia las manos con un trapo y sale a ver el origen del estruendo.

El castaño miró a su derecha sorprendido y vió a Nowaki, que estaba tendido en el suelo cubierto de ladrillos y a Daichi quien se había caído al recipiente grande de pintura ahora estaba completamente de color verde.

-¿Pero qué pasó aquí?-Abrió en grande los ojos y se los talló con las manos.

Resulta que Nowaki trataba de colocar un ladrillo que le faltaba al techo, cosa que cuando lo colocó, toda la construcción de la habitación se vino abajo llevándose consigo al peliazul.

Por suerte el pequeño se había hecho para atrás, pero tropezó y cayó sobre el recipiente de pintura.

-El techo hizo kaboobis-Responde Daichi.

-Se me cayeron un par de ladrillos del techo-Responde el peliazul.

-¿Un par?-Levanta una ceja-Miren que doy gracias porque están bien, ahora se me van a la ducha por que miren como quedaron.

Padre e hijo se miraron entre sí y se levantaron.

-¿Ohhh?-Hicieron ambos un puchero.

-Nada, a bañarse o se quedan sin almuerzo-Les señala la puerta.

Venganza de Tres. (#PremiosNakamura2017 (#MA2017)Where stories live. Discover now