Capítulo 8 Segunda Temporada

712 87 13
                                    

Rubén

Sujete la mano de Evan y camine más rápido por aquel oscuro callejon. Escuchando las sirenas sonando algo lejos, maldije entre dientes y me lleve un cigarrillo a la boca encendiéndolo y dando una gran calada

Evan: Lo lamento Rubén -Murmuró con voz rota- M-Me asuste, lo siento, me da miedo la oscuridad -Decía apunto de llorar, pegándose cada vez mas a mi-
Rubén: Esta bien Evan, no estoy molesto -Suspiré- Debiste haberlo dicho antes
Evan: Creí que te ibas a reír de mi -sollozo- mamá lo hacia y me encerraba en un cuarto oscuro por días. Decía que era mi castigo por ser un marica
Rubén: Tu madre es una perra, ella ya no puede hacerte daño Evan -Abrí la puerta y deje que el entrara, cerré y guarde el cuchillo- Vamos, es tarde y deberíamos descansar. Mañana haremos todo nuevamente
Evan: p-pero ¿Y si vuelvo a gritar?
Rubén: Eres fuerte Evan, aparte estaré contigo y nadie te hará daño. Yo te voy a proteger -«Porque te necesito»-

Evan asintió y subimos las escaleras hasta llegar al departamento, Evan encendió las luces y fue a su habitación, cuando cerro la puerta apague todas las luces y camine a mi habitación

Me recosté en la cama y cerré los ojos, estaba frustrado, Evan había gritado cuando entramos a una casa y me impidió matar a alguien o herirlo si quiera. Necesitaba hacerlo y de no ser porque ya tengo planes con el mocoso lo habría matado antes, pero no

El debe ayudarme a matar a ______, es lo único que necesito de ese mocoso

(....)

Evan tomo mi mano y rodé los ojos, si con eso no gritaba lo abrazaría. Entre a una habitación y puse a Evan delante de mi "Has lo que te mostré esta mañana, pero en el cuello de esa señora ¿Si?" Dije bajo y Evan asintió. Camino hacia la señora y yo al señor, corte su cuello rápidamente y Evan aun se debatía en si hacerlo

Hasta que lo hizo, inicio con una pequeña presión en el cuello y luego arrastro su pequeña mano con el cuchillo hasta la almohada. Sonreí y Evan me sonrió

Evan: ¿Estuvo bien? -Preguntó y asentí-
Rubén: Perfecto, solo recuerda que debes ser mas rápido -asintió- Bien, vamos a cenar, yo invito

Salimos de la casa, no sin antes lavarnos las manos y esconder todo rastro se nuestras huellas y cosas así

Evan de verdad que podía servirme y lo aprovecharía al máximo

Mi Asesina Favorita Donde viven las historias. Descúbrelo ahora