| Capítulo 52 |

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- Yo también, muñeca, muchísimo, de aquí al cielo y más allá.

Me volvió a besar, pero esta vez con más pasión. Me mordía suavemente los labios. Poco a poco bajó sus besos a mi cuello, mientras yo echaba la cabeza hacía atrás y disfrutaba.

- Rugge... - dije parándolo. - Vamos a mi habitación, no vaya a ser que Agus o alguien venga.

Me llevó en sus brazos hasta mi habitación. Lo seguía besando. Al llegar a la habitación, él cerró la puerta con el pie y me apoyó en la pared.

- Ruggerito, quiero que hagas una cosa. - dije entre besos.

- ¿Qué? - nos separamos.

- Haz que me olvide de todo lo que pasó, hazme el amor, Rugge...

Él me besó en señal de contestación. Poco a poco me fue acostando en la cama mientras él se ponía encima de mí. Me quitó la camiseta, dejándome en short y el bra. Volvió a besar mi cuello donde dejó una marca rojiza, intenté desabrocharle la camisa, ya desesperada tiré de ella y la rompí.

- Era mi favorita. - dijo él riendo.

- Te compraré otra, ahora no la necesitas. - reí juguetona.

Desabroché sus pantalones a la misma vez que él me quitaba el bra y el short.

- Mi amor, quiero que te sientas en el cielo. - sentí como me sonrojé.

- Contigo lo estoy todo el tiempo.

Empezó a besar mi frente, mis párpados, mi nariz, mi boca, mi barbilla. Sus dulces besos fueron bajando a mi cuello, a mi hombro, hasta llegar a mis pechos. Se me puso la piel chinita al sentir los labios de Rugge bajando por mi vientre. Fueron bajando más, hasta encontrarse con mis pantaletas rosas.

***

Sonreí mientras deslizaba sus pantaletas suavemente. Al terminar de quitárselas la miré, estaba sin nada de ropa y es... perfecta.
Empecé a besar su feminidad, sentí a Karol gemir. Fui abriendo con los dedos y besé aquella zona tan íntima.
Ella soltó otro gran gemido. Disfrutaba viéndola así.

- Rugge... - dijo ella en un gemido.

Volví a recorrer con mi lengua su feminidad.

- Rugge... oh dios. Para... creo que...

- Hazlo, mi amor. - sonrió.

Seguí torturandola y de un momento a otro, Karol soltó un grito de placer exhausta. Sonreí y subí a su altura. Ella me besó. Bajó mi bóxer y yo me separé un poco de ella.

- Muñeca...

- ¿Si? - dijo con su respiración agitada.

- No podemos hacerlo, no traigo condones...

.
.
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Estamos en #11 en fanfic :3

Y bueno... ¿alguien quiere maratón?

Por cierto, ya no quedan muchos capítulos.

Intentaré acabarla lo más rápido posible.. eso es todo, jajaja.

Voten :D

Saludos ✌

Muñequita  | Adaptada | RuggarolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora