Capítulo 3

30 4 59
                                    

Luego de haber cumplido la misión de sacar el peluche del árbol, ambos, Kashitarou y Mandii, fueron a la casa de ella a hablar de la situación con su madre.

La puerta estaba abierta, debido a que corría una brisa helada en aquel día caluroso, como si uno fuera a la playa. La madre de la chica estaba atentamente observando la televisión, sin prestar atención a los chicos que se hallaban en la puerta, a lo que Mandii decidió llamarla.

- Mamá... -dijo débilmente, y miró a Kashi con inseguridad.

Ante esto, el chico levantó su pulgar y le sonrió, indicándole que todo estaría bien. Así pudo sentir más confianza.

- Mamá~ -volvió a llamar con su tono habitual.

- Shh, luego hija, luego... -hizo una seña con su mano, para que bajara el volumen.

- Es que es importante -dijo con la voz algo quebrada.

- Eso también... -apuntó al televisor, sin dejar de mirarlo.

La siguiente nota, habla de un experimento que dañó a muchas personas en el mundo, causando un peor efecto notable en menores de edad. A continuación, el científico Kashitaro Kotarou se dirigirá a nosotros con algunas palabras respecto a las medidas que se tomarán...

-Kashi, tu papá... -dijo Mandii, susurrando.

- Ahora entiendo qué pasa... bueno, más o menos... -dijo algo confundido, rascándose la nuca.

"Es cierto, fallé al no revisar bien el experimento, principalmente las consecuencias, al no estar pendiente de sus continuos cambios, ignorándolos en cada intento realizado, por lo que ahora estoy creando uno similar que pueda eliminar el efecto.

Deben guardar la calma ante todo, esto al menos tomará unas semanas en reparar, por lo que rogamos no poner a prueba al 100% las habilidades entregadas, ya que no están del todo investigadas, pudiendo haber efectos secundarios, por lo que sospechamos. En el canal de radio se dará más infor..."

- ¡Tía! -gritó Luz, mientras se dirigía hacia ella- fui al baño, me miré en el espejo ¡y de pronto apareció esto! -apuntó sus orejas de gato y al mismo tiempo las movió.

- ¿Qué...? -alcanzó a decir la mamá, muy asustada.

- Mamá... yo también tengo... -corrió sus mechones de pelo y le mostró.

- ¡¿Eh...?! -gritó y se levantó de un salto del sillón.

- O-Oiga, n-no hay que perder la calma -dijo Kashi, mostrando sus manos en frente de la madre.


- Tú no sabes que yo... -decía y se alejaba un poco.

- Sí, lo sé, usted es alérgica, pero con tratamiento médi- -fue interrumpido.

- No sabes lo costoso que es... no puedo... al menos... ¿podrían ir a tu casa un momento? Ve-Veré qué haré... -decía mientras se iba a su habitación.

Ante aquella reacción, Luz estaba algo asustado, deseando encerrarse en la habitación, sin siquiera salir para comer. Se fue allá para lograr calmarse un poco, y decidió meterse al computador para hablar con su "amiga", activando y ajustando la cámara para que no captara sus orejas de gato. Estaba asustado respecto a cómo reaccionaría y tampoco sabía si ella sufría el mismo efecto, pero en algún momento debía decirle por tenerle mucha confianza.

Kashigato y su pandilla(?Where stories live. Discover now