Mi vida esta resumida en una palabra, porquería.
Hubiese preferido haber nacido en una familia humilde, donde se preocupan por ti, siempre están unidos. Esa madre tierna, a la que le puedes contar todos tus secretos, aunque fueran buenos o malos, ella siempre te aconsejaría de la mejor manera posible. Un padre que cada noche te contará cuentos; el héroe de muchas. O algún hermano, tu cómplice, con el que puedes contar para cualquier travesura que hagas o hagan.
Pero no, me tocó una familia todo lo contrario, adinerada, altiva, de lo único que se preocupan es de mantener la fachada de familia perfecta frente a las cámaras de televisión o alguna familia importante que venía de visita a la casa. Que decir de mi querida madre, lo único que hace es regañarme por cualquier cosa, hasta por respirar lo hace, sé que no fui una hija planeada, fui algo improvisto, mi amada madre se encarga de echármelo en cara cada día de mi perra vida. Mi padre, un canalla, en vez de ser mi héroe, es un ogro. Recuerdo alguna vez de mi niñez que en vez de contarme un lindo cuento para dormir, me contó una historia de terror, estuve con pesadillas por meses, y a ellos les importó un bledo. Soy hija única, sin cómplices.
Soy Juliet, producto de un condón roto, el error de mis padres.
ESTÁS LEYENDO
Condones Rotos.
Teen Fiction-¡Jason! -mi grito resuena en las paredes del baño- ¡Jason ven rápido idiota! Escucho como se caen algunos platos al suelo. Ahí va más dinero gastado. La puerta se abre. Jason me mira con los ojos muy abiertos. -No me digas lo que creo que estoy pen...
