Capítulo 27.- No eres tú.

Start from the beginning
                                    

Me quedo quieta por unos segundos a ver quién estaba algunos metros frente de mi vista.

Jason.

No lo había visto hace tres semanas.

Como la última vez que nos vimos, solamente nos delimitamos a mirarnos.

Jason se mantenía apoyado en su motocicleta negra mientras mascaba lo que al parecer era un sándwich, su mano tenía una bolsa café que era de panadería. Subió su mano para llevar un pedazo de pan y masticarlo lentamente mientras me miraba.

Trague en seco por la situación. Inmediatamente desvié mi mirada al igual que mi cuerpo, me fui directamente para la entrada de la casa de Justin. Toque mis bolsillos buscando la llave para entrar a su casa.

Sentí un motor rugir y evite mirar.

Rápidamente y de forma torpe sacó las llaves para entrarla a la casa de Justin. El motor rugió nuevamente.

Me asusté.

De forma rápida entre a la casa de mi novio y cerré la puerta.

Mi corazón empezó a latir fuertemente pero de apoco se fue normalizando. El ver a Jason me daba algo de revuelto en mi estómago, sentía sentimientos encontrados, por una parte por todo el drama amoroso que había tenido con él y por otra, cuando me había forzado que lo besara en los camerinos.

En seguida quite los pensamientos para subir a los escalones en dirección hacia la habitación de Justin.

Abrí la puerta de habitación suavemente para no despertarlo. Me fije que estaba de espalda cuando me empecé acercar a su cama. Noté como dormía plácidamente mientras me incorporaba en sus sabanas. Toque sus mejillas suavemente de forma cariñosa, y pensé ¿Qué pasaría si hago lo mismo pero en su trasero? Entonces me mordí el labio curiosa y traviesa, baje mi mano hasta la zona de su trasero y lo apreté suavemente para que no despertara.

Se sentía como tocar una masa muy suave pero a la vez firme.

—¿Y no te gustaría tocar otra cosa mejor? —espeta de pronto Justin en una forma ronca. Al instante quite mi mano de su nalga.

—Yo... uh lo siento —dije apenada mientras él se daba vuelta en la cama para mirarme.

—Al parecer te gusta tocarme mucho el trasero —comenta Justin.

—Lo siento —dije avergonzada.

—Después no reclames cuando te toco algo sin tu consentimiento —me dice con una sonrisa traviesa

—Pervertido —le digo.

—Ay si pervertido, pero no ando tocando nalgas ajenas por las mañanas —se burla de mí—. Vete a la sala para que me esperes, para que me pueda duchar tranquilamente antes haga algo contigo.

—Uy si —le digo sarcástica.

Salí de la cama en dirección hacia la sala de su casa. La verdad yo quería seguir acostada, las sensuales sabanas estaban calientes y había salido muy temprano de las mías.

Me senté en sillón al esperarlo, encendí el televisor y baje el volumen inmediatamente para que nadie despertara. Después de veinte minutos bajo Justin, se había puesto un pantaloncillos cortos y una camisa, su cabello seguía húmedo.

—Ahora si mi amor —se sienta para abrazarme—. Hola.

—Hola bombón —le digo coqueta.

—No sabía que era un chocolate —expresa sonriente.

—Para comérselo —comentó para morderle el ovulo de la oreja.

Seduciendo a una nerd ©Where stories live. Discover now