Capítulo 5.- Un día para olvidar.

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¿De verdad había experimentado algo así..? Ni ella misma era capaz de creerlo. Lo sucedido la tarde anterior no paraba de rondar por su cabeza, era una sensación tan extraña.. El timbre que marcaba la hora  del recreo la despertó de aquel trance. Atrapó su mochila rápidamente y se dirigió hasta el porche, bajando con soltura  las escaleras. A medida que se encontraba en un piso menor, se le unían diferentes amigos, por lo que terminó llegando a la cancha rodeada de unos cuántos componentes, e intercambiando carcajadas con cada uno de ellos. Al fin, un minuto de relax. Aunque, éste en seguida fue interrumpido tras ver la silueta de Connor. ¡Dios! ¿Y ahora cómo se suponía qué debía actuar? ¿Le había dicho algo ayer? ¡No se acordaba!  Optó por seguir hablando con el resto de amigos, ocultando su inquietud con irónicas sonrisas. Entonces fue cuando el chico se unió al grupito, saludando a todos con alegría y entusiasmo. Justo cuándo le tocaba saludar a la pelirroja, siguió de largo. ¿Qué le pasaba? Siquiera se atrevió a mirarla. Eso la dejó aún más desconcertada, aunque nuevamente, ya era hora de volver a clase. 

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Intentó hablar con su amigo al salir de clase, pero éste actuó de igual manera que en el recreo,  ignorándola por completo. Dio un fuerte puñetazo al colchón de la cama, dejando caer sobre éste el móvil. Al cabo de unos segundos, sentía como gran parte de la cama comenzaba a vibrar. ¡Un Whatsapp recibido! 

Número desconocido.

Nívea.. Soy Ed, ya sabes, Edouard, el de clase. Y sino lo sabías pues, ya lo sabes!! Esto.. Unos amigos van a ir a la pista de patinaje, en el centro comercial. Me dijeron que eras una experta, te quieres venir? Espero que sí, un beso guapa :)

Edouard.. ¡Edouard! ¿Cómo iba a olvidarlo? Fue el chico que le tiró hace medio año todo el desayuno encima, en la cafetería. Era simpático, le pidió disculpas como unas cincuenta veces. Además, ¡ésta vez le había invitado a patinar!  Debía responderle antes de que cambiase de idea. 

Nívea.

Sí, claro que iré!! A qué hora nos vemos? Y dónde? 

Su respuesta no se hizo esperar, en menos de treinta segundos, su móvil se encontraba nuevamente vibrando, al igual que le seguía el ritmo su cama. 

Edouard. 

Estáte preparada en quince minutos, ya voy para tu casa. Hasta ahora <3

Bien, tenía quince minutos para prepararse. ¿Éste chico nunca había quedado con una "mujer"? Espera.. ¿Por qué lo decía entre comillas? ¡Ya era una mujer! Por lo menos anoche lo había dado a  entender. ¡Ya estaba otra vez con ese tema! Prometió no volver a pensar en ello, tan sólo centrarse en la quedada de hoy. Eligió su ropa, se entró ésta rápidamente, peinó su largo, y anaranjado cabello con igual velocidad, y salió disparada de su habitación en cuánto escuchó la bocina de un coche sonar. Dejó caer en el aire un " ME VOOOOOY ", cerrando la puerta tras de sí. Allí estaba Ed, mucho más atractivo de lo que le recordaba. Subió al coche con una gran sonrisa, dándole las gracias tanto por su invitación a la pista de patinaje como para ofrecerse voluntario al llevarla en coche. 

Fue un camino silencioso, el chico era de pocas palabras, aunque la música que se escuchaba de fondo hacía el ambiente más llevadero. Y allí estaban ambos, frente a su destino. El muchacho saludó a sus amigos, después de presentarle cada miembro a Nívea. Pasaron una tarde increíble, llena de carcajadas, caídas, rasguños, etc. Conoció más a fondo a su acompañante, ¡era un chico magnífico! "Casi tan dulce como el chocolate, e igual de atractivo que los huevo kinder."  Se decía para sí misma. Además, era una persona bastante locuaz y agradable. Tras finalizar su actividad, recibió un whatsapp, destinatario.. ¿Connor? 

Connor *-* 19:40

Hey, nena. Te apetece volver a repetir lo de ayer? Tengo una lista larga de tías que lo están deseando, decídete pronto ;)

Chascó la lengua y gruñó en voz baja nada más leerlo, ¿pero de qué iba? ¿Dónde se escondía el increíble, enigmático, cariñoso y dulce Connor? Antes de poder contestar nada, se anticiparon a su pregunta, la cual nunca llegó a las manos del chico. 

Connor *-* 19:55

Estoy harto de esperar por alguien como tú. Tengo mejores cosas que hacer, nena. Pero si cambias de opinión, únete al trío vale? 

Dios mío, cada palabra la desconcertaba aún más. Comenzó a inhalar el oxígeno por la nariz con demasiada fuerza, tanto que por momentos pensó que se asfixiaba. Notaba como tanto su rostro como sus párpados cada vez pensaban más, al igual que su cuerpo. Fue entonces cuando de la nada apareció Ed, sujetándola y evitando que ésta terminase en el suelo. Pero para su sorpresa, frente a ella se encontraba nada más y nada menos que.. Lucas. 

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Este es cortito, pero lo necesitaba para seguir con lo que tengo planeado. Espero que les esté gustando, (aunque cada vez lo deje más en el aire). No estoy muy motivada con esta historia, peeero.. Necesito su ayudita. :( Como siempre, son bienvenidos los coments, etc, etc. ¡Gracias pequeños saltamontes!

¿Eres feliz o sólo sonríes? [ PARADO. ]Where stories live. Discover now