LOCO SIN DELIRIO ♠Yoonmin♠

Capítulo 2

-¿Qué?, ¿No te gusta?—preguntó Jimin tratando de sonar confundido.

-No es que no me guste, simplemente es otra ciudad más para mí.

-Pero cada ciudad tiene lo suyo, como las personas.—argumento Jimin ante la respuesta de Yoongi.

-Bueno, ya es de cómo lo vea cada quien.—respondió mientras rodeaba los ojos, era alguien que no cambia de opinión fácilmente.

- ¿Ves?, todos tenemos algo único que nos diferencia—voltea con una sonrisa— Cambiando de tema, ¿Te ha gustado la escuela?

-Pues... si no estuviera tan lejos de mi departamento estaría mejor.—lejos para él eran unas calles.

-Jaja, ya veo, ¿Así que no eres de los que caminan?—observó sus piernas, eran las más delgadas que había visto de un chico, pareciera que podías romperlas con facilidad, se le figuró como a las de una chica.

-Apenas vine aquí con esfuerzo.

-Jaja enserio que eres muy divertido, ¿Por dónde vives?—preguntó curioso.

Yoongi estaba un poco sorprendido, nunca le habían dicho algo así como el de ser "divertido", y ahora que pensaba, era la conversación más larga que había tenido en años, ¿Cómo es que se sentía un poco cómodo con alguien que apenas conocía?

-Vivo por la colonia "Lulas".—indicó Yoongi.

-Oh, ¿En serio? Me queda de pasada, mi casa está a unas calles de ahí, si quieres puedo recogerte en carro para que no camines, ¿Qué dices? —propuso Jimin rápidamente, esperando como respuesta un "sí".

No le agradaba mucho la idea de ir con alguien por las mañanas, mientras más tiempo pudiera estar solo era mejor para él, pero detestaba la idea de caminar y más por esas horas tan tempranas.

-Mmm... Bueno, mientras no camine está bien.—aceptó finalmente.

-Muy bien. —Le da una palmada en su hombro y se levanta. -Creo que es mejor irnos ya, es muy tarde.

-Sí. —se levantó también, metiendo sus manos en los bolsillos de su pantalón.

-Entonces mañana paso por ti—diciéndole con una sonrisa.

-Sí..., ¿A qué hora? — preguntó deseando que la respuesta no fuera una hora tan temprana.

-Mmm... ¿Qué te parece a las 6:40 a.m.?—indicó Jimin esperando la respuesta del contrario.

-Sí, está bien.—afirmó.

-Mas te vale no quedarte dormido—Apuntándo con el dedo índice diciéndo con un tono burlón.—Te espero mañana, tengo que ir a otro lugar ahora.

-Bueno, adiós.—se despidió con una voz casi inaudible, mientras se volteaba para alejarse lentamente.

•Jimin•

-Así que aparte de que será mi compañero de clases vive cerca— se dijo asimismo con una sonrisa mientras caminaba.—Esto no puede ser mejor, así podré investigar un poco más de su casa y de él con más facilidad. Es nuevo aquí, no conoce a nadie y cree que soy su guía, tengo todos los puntos a mi favor. Esto será divertido. —Dijo mientras se ponía la capucha en la cabeza.

Se dirigía a un edificio el cual se ubicaba en uno de los lugares menos frecuentados de la ciudad, estaba oscuro y solo se podía escuchar el ruido del aire, ¿Quién iría aquel lugar de noche? O ¿Para qué?

Entró a un edificio el cual parecía abandonado, sino antes revisar si había sido seguido por alguien, bajó unas escaleras y se dirigió a la última puerta del aquel pasillo oscuro, tocó 3 veces y dijo unas palabras que apenas se podían escuchar si estabas justo a lado, un señor con una gran barba y lleno de tatuajes le abrió la puerta.

-Tan puntual como siempre.—sonrió el señor mientras lo dejaba pasar.

-¿Ya tienes mi paquete?—fue lo primero que salió de su boca, con un tono impaciente.

-Y directo también, sí, llegó esta mañana, revise y no hay nada fuera de lo normal.

-Eso espero, o ya sabes lo que podría pasar.

-Sí —bufó el hombre con barba—como digas. —trataba de no sonar asustado, pero sabía de lo que Jimin era capaz de hacer.

Le entregó una caja del tamaño de la palma de una mano, era de color blanca, y estaba bien sellada, Jimin lo recibió y con una sonrisa quiso abrir el paquete, pero mejor lo dejo para después, no quería arriesgar aquel objeto que tanto había esperado.

- Bien, aquí está el dinero.—le entregó un gran bonche de billetes.

-Gracias, ya sabes, si quieres otra cosa, solo pídelo.—dijo el señor mientras miraba con una sonrisa todo el dinero que apenas se le había entregado.

-Sí, ajá, como digas, ya me tengo que ir. —se fue sin voltear a ver al sujeto de nuevo.

Llegó a su casa, no estaban sus padres, como era de esperar, era muy extraño que ellos estuviesen en casa, sólo estaban en días especiales, si es que podían, o de vez en cuando, pero era muy difícil que eso llegara a pasar, así que Jimin no se preocupaba por ellos.

Caminó hacia al sótano, agarró la llave que tenía siempre en su bolsillo y con ella abrió la puerta, bajó las escaleras, y sin mirar alrededor fue a la única mesa que se encontraba ahí, puso el paquete sobre ella y con una navaja abrió cuidadosamente la caja. Cuando por fin pudo abrirlo, se quedó admirando aquel objeto que se encontraba en el paquete, con una gran sonrisa y unos ojos llenos de luz.

Cada ser humano tiene aquellas cosas que hacen que se les iluminen los ojos, son esas cosas en las que jamás se cansan de verlas, ya sea una serie que pueden repetir miles de veces sin aburrirse, una persona, una obra de arte, una infinidad de cosas, pero, ¿Qué podría haber en ese paquete para que Jimin estuviera así?

♠Se que me tardo en actualizar, pero la escuela me exprime hasta morir, y más con los exámenes de admisión, pero tratare que en cada semana haya 2 capitulos por lo menos, y si, me gusta dejar las cosas con suspenso jajaja ♠