3.- Relato de superhéroe con fobia a la oscuridad...

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  3.- Imagina que eres un superhéroe con una gran fobia a la oscuridad, escribe un relato de superación.  


Tenía toda la noche preparada, la cena estaba en la estufa, la selección de películas esperando en la sala, había hojas de colores, pintura... Él miraba con gusto como todo había salido justo como lo había planeado.

Miraba el por la ventana de la cocina de tanto en tanto, la luz del porche iluminaba los alrededores, pero más allá de su automóvil, había una oscuridad impenetrable. Solo de verla, comenzaba a sentir un vacío y frío en el estómago, volvió a bajar la mirada a sus quehaceres, no iba a permitir que un ataque de pánico arruinara todo.

Tomó un vaso de agua y sacó del refrigerador uno de los pequeños sándwiches que había preparado de snaks para esa noche. Estaba acostumbrado a ese tipo de situaciones, cuando sentía que el miedo lo empezaba a consumir, tomaba un vaso de agua lentamente, enfocando todos sus sentidos a esa acción, así se olvidaba del miedo y su cuerpo se relajaba pero para que eso funcionara, tenía que estar lejos del detonante, de la oscuridad.

No recordaba cuando había comenzado su fobia, para él no había existido momento en su vida en que la oscuridad fuese un lugar placentero; no había acampado nunca, no salía de su casa después de la puesta de sol ¡no había visto una película en el cine! Josh no sabía a qué se debía su terror, había ido con psicólogos y ninguno lo había podido ayudar. Para él, la oscuridad era como una entidad, algo que quería ir por él y lastimarlo.

Iba a medio vaso de agua cuando la puerta sonó, se quedó paralizado hasta que escuchó la voz de Julia gritando su nombre.

-¡Ya voy! – dejó su vaso en el fregadero y se encaminó hacía la puerta.

-Está helando aquí afuera, Josh ¡Abre ya! Nicky se está helando. -Su hermana siempre exageraba las cosas, esa era la forma de ser de Charlotte.

Abrió la puerta y vio a su hermana cargando al pequeño Nicky, que al verlo estiró sus brazos para alcanzarlo.

-¡Tío, Josh! Mamá dijo que hoy podré dormir hasta tarde y que veremos películas ¡y jugaremos hasta que ya no pueda más!

-¿Todo eso te dijo tu mami? – él ya tenía a su sobrino en brazos y miraba a su hermana esperando una explicación.

-Eres el mejor hermano del mundo, gracias por cuidar a Nicholas esta noche. Andrew y yo hemos esperado por esta reservación desde hace 6 meses. Es un día muy importante.

-Claro, los 2 están escalando en sus trabajo, acaban de comprar una casa...- se acercó más a su hermana y se distanció un poco de Nicky para que no escuchara – Y la pequeña Rose viene en camino. –Terminó la frase guiñándole a su hermana.

-Sí, todo eso. – Desvió la atención de su hermano y tomó la mano libre de su hijo.- Amor, cuídate mucho, obedece a tu tío y no te sobrepases con las golosinas, no queremos que el tío Josh se arrepienta de haber aceptado cuidarte.

Besó la cabeza de su pequeño y él puso su pequeña mano en la mejilla de su madre.

-Adiós, mami.

-Adiós, mi cielo.

Josh veía como le costaba a su hermana desprenderse de su pequeño, aunque fuese una despedida momentánea él no entendía que tanto significaba para ellos. Él y Nick esperaron a que Charlotte subiera al coche y se perdiera a la distancia.

-Muy bien Nicky ¿listo para la noche de chicos?

-¡Sí! –Su sobrino se veía francamente emocionado y cuando lo colocó en el suelo el pequeño se fue corriendo a la sala para ver que sorpresas le había preparado su tío.

52 Retos de escritura 2017Donde viven las historias. Descúbrelo ahora