Capitulo 1

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Las nubes están tan cercas que casi puedo tocarlas, pero la ventanilla de vidrio de el avión no me permite sentir la deliciosa brisa, no hay muchas personas montadas en este avión, pero hay algunas cuentas, con suerte me toco sentarme sola, hay dos asientos mas disponibles a mi lado, pero están vacíos y eso me hace sentir bastante bien.

Ya puedo vislumbrar la bella Inglaterra desde lejos, esta bastante linda y se ve mas enorme de lo que recordaba, la ultima vez que pise un pie en Oxford fue cuando tenia unos quince años. Pero, ahora ya han paso unos diez años de eso y me siento realmente extraña estando aquí otra vez.

El avión aterriza y sudo en frió porque los mayores accidentes son cuando van a aterrizar y me da un poco de miedo, soy una mujer bastante fuerte y temeraria, pero soy humana, y si, tengo muchos temores como todo ser humano. Abren las puerta y ya asegurados de cualquier peligro nos dan el permiso de salir del avión, desde adentro veo como las personas están recibiendo a los demás pasajeros, hay mujeres llorando de felicidad al ver a sus maridos o hijos, los niños saltan y gritan de alegría, y los hombres comienzan a sonreír como si hubiera pasado décadas de no ver a esa persona querida, alzo la mirada para ver si alcanzo a ver a mi madre, aun no la alcanzo a ver, seguramente se retraso por el trafico o paso algo a ultimo tiempo, pero se que llegara en cualquier momento. Salgo del aeropuerto y me siento en unos de los bancos que están a la salida de el.

Ya han pasado dos hora y nadie llega por mi, ni siquiera, algún amigo lejano o un primo o mi tía Babel, pero nadie llega, me siento como una estúpida al creer que alguien vendría por mi. Miro mi reloj de muñeca de reojo y me levanto para parar un taxi, me paro en la parada y hago señas para que un taxi se detenga y lo hace, le doy la dirección de la casa de mi madre, el conductor asiente y comienza a manejar, una lagrima sale de mis ojos y sin pensar me la arranco bastante rápido antes de que alguien se diera cuenta.

El conductor me deja en frente de mi antigua casa y le agradezco mientras le paso el dinero que le corresponde por su trabajo, salgo del auto y me acerco a la puerta delantera, esta bastante linda la casa, casi ni siquiera la reconozco, es una casa de doble planta del color roza pastel con blanco en las esquinas de las ventanas. Siento algo de miedo entrar ya que seguramente ellos no quieren saber nada de mi, bueno, y no los culpo, porque llevo mas de diez años sin hablar con ninguno de ellos. Me lleno de valentía y abro la puerta lentamente para no hacer ruido, camino algo lento, llego a la entrada y me paro en frente de la puerta, oigo que hay mucho ruido adentro de la casa, toco la puerta, nadie responde, toco otra vez, y nadie responde, así que cojo mi maleta que puse en el suelo, así que la levante lista para irme, pero antes de que bajara los escalones alguien abrió la puerta, volteo y hay esta mi madre para en la puerta con un vestido color rosa oscuro con unas floresitas en su cintura.

—Hola, perdón por tocar así, solo es que, hay no se, mejor me voy...—dije alejándome lo mas rápido que pude de la entrada, cuando estaba en la puerta, alguien me agarra del hombro, me acerca a ella y me abraza, me quedo sorprendida por su gesto, pero después de unos segundo, acepto su abro y la abrazo mas fuerte.

—Te extrañe mucho, mi niña...—dice apretando mas su abrazo, me había olvidado lo bien que me sentía cuando ella me abrazaba, no puedo creer que me alga perdido diez años de nuestra hermosa relación, me aparta de ella y me mira con lagrimas en los ojos—entra, te tengo una sorpresa...

Se limpia las lagrimas y me agarra del brazo y me lleva casi corriendo adentrándome a la casa—sorpresa—dicen muchas personas al mismo tiempo, al darme cuenta estaba toda la familia adentro de la casa, veo a mis tíos, a mis primos, a mis viejos amigos, por dios, me tapo la boca de la alegría y comienzo a abrazar a todos los que están en la sala.

Me siento tan feliz de estar con todas aquellas personas que me hacían tan feliz en mi infancia, nunca me imagine que haría esto mi madre, pensé que me odiaba por no haberle escrito o llamado en estos diez años.

Colín y Elle en multimedia.

Hola

Espero que les guste este capitulo ya que es el inicio de esta inesperada historia, digo inesperada porque es bastante inesperada, espero que voten mucho en esta historia y dejen muchos comentarios y si tienen alguna pregunta, solo envíenme un mensaje y le responderé en cuanto pueda.

Haré muchas dedicatorias y haré muchas preguntas para ver si en realidad le están poniendo atención a la historia. Muchas gracias los amo a todos.

GRACIAS...

Las Sombras Del DestinoUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum