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La cita. Al fin ha llegado.

Sonrío a la cámara, sé que me adora.

Poso y exibo mis "dotes".

A veces me gustaría ser un chico y ser mi novio (o amigo con derecho a roce) y poder tocarme y f*llarme duro contra una pared o hacerme llegar al placer máximo...

Cuando la sesión de fotos termina, voy a los vestuarios y me visto a vista de todas mis compañeras.

Algunas están tan buenas... Me gustaría poder lamer a algunas de arriba a abajo.

Salgo a la calle y cierro mi cazadora vaquera. Mis medias, mis botas y mi mini-vestido rosa completan mi look. Además del bolso y mi pelo en una trenza.

Un Mercedes pita y me dirijo hacia él. Me meto en el asiento del copiloto y miro a Harry.

-¿Te has puesto tu vestido más corto? -me pregunta divertido.

-Puede... -rio. Me tiende un pañuelo- ¿Para qué es esto? -me tiende un segundo.

-Ojos -señala el primero-, boca -señala el segundo.

Me los ata y noto el coche moverse.

-¡Es fantástico! -me ha traído a un balneario. Cuando me ha quitado la venda de los ojos, me he sentido... con ganas de saltar y gritar como una niña pequeña.

Salto a su cuello y le doy un pequeño pico.

Entramos con las toallas y nos dan un masaje a cada uno. Luego nos metemos en una piscina pequeña de una salita individual y llena de vapor.

Él se acerca a mí y me abraza.

-¿Te gusta? -me pregunta.

-No, ¿por qué me has traído aquí? -mi voz se vuelve más aguda e intento imitar a alguien arrogante- ¡Quería algo más caro!

Harry echa su cabeza para atrás y se rie.

Acerca su cara a la mía y me besa. El beso se vuelve más apasionado y me coloco sobre él.

Me separo de él y le miro divertida mientras señalo hacia abajo. Él asiente y sonríe.

-Tú -dice.

Nos saca de ahí y me guía a través de una escalera.

Llegamos a una blanca, rosa y beige habitación clásica.

Me tumba en la cama y me besa con pasión.

Se arranca la toalla y me la arranca a mí.

Me sigue besando con pasión e introduce su lengua en mi boca que se une a la mía y bailan juntas.

Sus manos me soban, juguetean, pellizcan mis pez*nes.

Mis dedos tiran de su pelo.

Estamos tumbados en el final de la cama, solamente mi espalda está apoyada en ella, estoy formando un ángulo recto.

Me sorprendo cuando arremete fuertemente y me penetr*.

Entra y sale. Me muevo a su merced. Grito su nombre.

-¡Más, más! -pido y jadeo. Lo noto y gimo- Voy a...

Harry llega al orgasm* dentro de mí y no tardo en llegar yo también.

Con todo el sex* que tenemos, me alegra tomarme la píldora. 

Sale de mí y nos tiramos en la alfombra que cubre todo el suelo.

Me besa durante unos pocos segundos y nos dormimos.

Creo que estoy empezando a sentir algo hacia él...

Ella (H.S.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora