Capítulo 19: Buenas noches.

Start from the beginning
                                    

–      ¿Y cómo está Paul? Le veo muy encariñado contigo. Es más creo que hasta te ha besado y todo. ¿A que sí? Te ha dado un beso, lo sé – dijo ella sonriendo pícaramente.

¿Por qué sonreía? ¿Por qué no se enfadaba como se hubiese enfadado cualquier madre que hubiese encontrado a su hija besándose con un chico?

–      Sí – sabía que no podía mentir.

Ella se sentó en la cama, a mi lado.

–      Es un buen chico Becca, pero tengo miedo de que lo pases mal… Sin embargo no me importa que esté cerca de ti porque sé que jamás te hará daño. Al menos no intencionadamente.

–      ¿No te importa que me dé clase? He hecho un trato con él – dije rápidamente.

La doctora Breaker frunció el entrecejo y advertí un gesto de desconfianza.

–      ¿Qué trato?

–      Que si vuelve a pasar él se irá. Pero si no vuelve a pasar y saco buenas notas en junio, seguirá dándome clase.

La vi asentir, despacio.

–      A veces pienso que eres demasiado coherente. Yo me veo obligada a hablarte como madre: haces bien… Pero sin embargo, si yo fuera tu amiga… Te diría otra cosa.

–      ¿Qué? – pregunté ansiosa.

–      Por desgracia soy tu madre y no tu amiga así que fin de la conversación… – se levantó y caminó hacia la puerta –. Y como le pille besándote le echo a patadas.

Y se marchó escaleras abajo.

“Tengo una madre peculiar”, pensé en aquel momento.

Entonces mi teléfono vibró. Me abalancé sobre él cuando vi que el mensaje nuevo era nada más y nada menos que de Paul.

“Duerme bien, amor” , decía.

Dejé caer una lágrima que no supe clasificar. Tal vez felicidad, miedo, éxtasis.

Me dormí murmurando la palabra “amor”.

                                                          ***

Al día siguiente, la clases se desarrollaron de manera habitual. A mí me costó concentrarme algo menos que el día anterior pero bastante más que el último trimestre en el que Paul sólo había sido un buen amigo para mí.

Ahora no dejaba de pensar en qué nos esperaba. Porque si él se iba a marchar… ¿Me iría yo con él?

Incluso pensé en dejar mi sueño de la medicina por seguirle. Pero se me hacía tan difícil hacerme a la idea.

Y además, si le comentaba aquella idea, se asustaría y se alejaría de mí rápidamente por temor a tirar mis sueños a la basura.

Pero yo ya no sabía qué deseaba más. Si estar con él o ser médico.

Me encontraba en una terrible disyuntiva.

–      Becca, vuelve – dijo Stela cinco minutos antes de terminar la clase de inmunología.

Asentí y abrí mucho los ojos. Ella me observó intrigada.

Sonó el timbre y Estela se levantó. El resto de alumnos comenzaron a salir al pasillo, yo cogí mi mochila y seguí a Watson hasta la puerta. Pero entonces Stela me detuvo posando suavemente su mano sobre mi hombro.

Becca Breaker(I): Contigo © Cristina González 2013/También disponible en Amazon.Where stories live. Discover now