Buen Perrito

677 43 5
                                    

*Me acariciaban el cabello como si de un perro se trataba mientras estaba sentado como si fuera uno, ya era algo normal para mí que me trataran como uno ya que para ellos eso era, un lindo cachorro de color rubio.

La criatura que me acariciaba la cabeza se detuvo al ver uno de sus compañeros acercarse, instintivamente me pare también solo que en mi caso en cuatro patas.

Se quedaron hablando un buen rato y claro no entendía absolutamente nada, siempre era así cuando hablaban entre ellos utilizaban un lenguaje muy diferente al nuestro pero cuando eran a nosotros podíamos entenderlos fácilmente.

La criatura que estaba a mi lado comenzó a caminar y como está tenia en sus manos la correa que me ataba tuve que comenzar a seguirle, en mi cuello descansaba un collar de perro de color azul celeste con una pequeña placa que decía algo pero al estar escrita en su idioma no podía leerla pero intuía que era mi nombre y la dirección en donde vivía junto a la criatura que se hacia llamar mi dueña.

Pasamos cerca del llamado "plantel bajo" tenía ese nombre porque aparte de que quedaba en la planta inferior era donde vivían los delincuentes si es que se les podían llamar de ese modo, si estuviéramos en la tierra tal vez ese lugar lo llamarían comúnmente "barrio de clase baja".

Al ver los rostros de todos aquellos, tanto criaturas como mascotas el cabello de la nuca se erizó y como si era un chihuahua me acerque corriendo a mi "dueña" escondiéndome entre sus piernas mientras "ladraba" a las mascotas de aquellas criaturas y claro a ellas también.

Al sentir las manos de alguien cargándome me puso más nervioso e intente salir corriendo pero al ver que eran de mi dueña me tranquilizó.

Salimos de aquel lugar y nos adentramos al plantel comercial al parecer mi criatura deseaba comprar algunas cosas y así fue entramos a varias tiendas algunas de comida otras de ropa pero todas eran para "mascotas".

Luego e salir con cuatro o cinco fundas regresamos a nuestro hogar que consistía en una casa de un solo piso ni tan grande pero tampoco tan pequeño, de color blanco como todo lo demás en éste lugar.

Por dentro era lo mismo lo único que le daba algo de color a éste lugar eran mis pertenencias, cama de perro para una raza grande como el pastor alemán de color rojo y algunos juguetes de goma tirados por el suelo.

La criatura cerro la puerta con pestillo asegurándose que nadie en tratara o que yo saliera desde adentro, era algo tonto ya que sabia las consecuencias por escaparme de mi dueño por lo que escuche de algunas mascotas un día de entrenamiento, a los que se escapaban los golpeaban o no les daban de comer hasta que se morían de hambre.

Sacudí mi cabeza para alejar esos pensamientos de mi interior y con pasos cortos llegue a mi "cama" para tirarme en ella y cerrar los ojos, sintiendo a mi dueña caminar de un lado para otro.

Parece que vendrán de visita ya que solo se pone así cuando viene alguien a la casa, sumando que me compro algunas cosas como si deseara presumir ante su invitado.

No le preste atención y me estiré en la suave cama dejando parte de mis manos y piernas fuera de está, era deprimente ver que hace apenas unos años los seres humanos hubieran sido los que estuvieran limpiando la casa para algún invitado, presumiendo sus cosas para ver que eran mejor que sus amigos y que ahora simplemente eran la mascota de alguien.

Al verme en mi actual posición lo único que pide hacer fue sacar un risita un poco baja, si era deprimente pero no había de otra que aceptarlo ya que si no puedes jurar que eres persona muerta.

La criatura que se encontraba moviéndose de un lado a otro se detuvo y pensé que a lo mejor ya había terminado de limpiar pero al rato escuche que me llamaba de algún lugar de la casa.

Al guiarme por el sonido de su voz llegue al cuarto de baño, me detuve en el umbral de la puerta viendo a mi dueña con una esponja en sus manos de color blanca, retrocedí con la idea de salir corriendo pero antes de poder hacerlo mi dueña me carga para luego meterme dentro de la bañera*.

-tienes que estar limpio, debes verte bien para las personas que vendrán hoy *decía mientras me quitaba las ropas que llevaba puesta para luego colocarla dentro de un cajón para ropa sucia, claro que solo era para mis ropas*.

*Incliné mi cabeza hacia un lado indicando que no entendía lo que decía pero está no siguió hablando y se dedicó en estrujarme con la esponja.

Lavó mis cabellos y mis orejas en fin todo, con una toalla me seco el cuerpo a medias ya que no me deje secar y me fui a sacudir como si realmente fuera un perro, la criatura salio del cuarto de baño para regresar con la misma ropa pero esta vez limpia la que no dudo en ponerme.

Me volvió a colocar el collar y me dejo en la sala para luego desaparecer, me quede jugando con algunas pelotas de colores que me había comprado hace algunos días.

Cuándo me aburrí me quede dormido encima del sofá al rato sentí como mi dueña me empujaba para bajarme de éste lo que hice de mala gana.

Me alimento con la típica comida de animales solo que esta parecía carne de res pero molida al punto de parecer una pasta, la puerta fue tocada y mi dueña que se encontraba sentada en el sofá se levanto para abrirla.

De ella apareció dos criaturas parecidas a mi dueña, mire a sus pies para ver si traían consigo una mascota pero al parecer no la llevaban, era algo raro ya que siempre la llevaban consigo pero al parecer en esta ocasión optaron por dejarlas en sus hogares.

Las criaturas comenzaron a charlar en su idioma a la vez que se reían, observé la puerta de color blanco que se encontraba semi abierta por el rabillo del ojo veía a las criaturas charlar muy ajenas a lo que pasaba por mi mente.

Era el mejor momento para poder salir y dar un pequeño "paseo" lejos de mi dueña, al dar algunos pasos sentía mi corazón golpear contra mi pecho pero cuando me faltaban solo algunos pasos para cometer mi objetivo escuche a mi dueña llamarme para luego ser cargado como un chihuahua y ver la única salida ser cerrada enfrente a mis narices.

°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°

Espero que le guste esta historia no me crearían si les dijo de donde me vino la idea para esta historia, digamos que mi prima tiene una perrita y como vive con nosotros aveces trae a su perrita bueno un día ella vino y la trajo ese día estaban pasando una película de ciencia ficción y una cosa vino a la otra; al final combine las dos cosas y aquí la tienen 😂

Recuerden dejen un comentario y voten es gratis.

HumanoidesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora