capitulo 23

4.1K 133 7
                                    

Capitulo 23. — Secret Sex.

-Un año despues-

— ¡Sorpresa!- Gritaron todos al unisonó, haciéndome estremecer y dar un saltito. Los mire sonriendo, ninguno había llamado y ya creía que se empezaban a olvidar....

—Demonios. ¡Gracias!- Dije sonriendo, Charlotte se acerco a mi y me sonrió.

—Felicidades amiga- Me abrazo. —Un año mas de vida…

—Me hago mas vieja- Admití riendo.

— ¡Oh por Dios! No digas tonterías ______- Dijo riendo, me beso la mejilla. —Que cumplas muchos años mas, hasta que te hagas vieja y arrugada.

—Oh, gracias por el apoyo amiga!- Reímos, y el segundo en acercarse a mi fue Joseph.

—La hermosa cumpleañera- Me abrazo sonriendo. —Y pensar que hace un año nos conocimos- Dijo en el abrazo.

—Si, y pensarlo que hace un año te llevabas mal con Harry.

—Aún lo hago, no somos los mejores amigos- Reímos. —Hace un año, cuando nos besamos en la enfermería- Susurro en mi oído. Me estremecí al recordarlo.

—No lo olvido, no llevabas ni un día de conocerme y ya me habías besado- Respondí seria y tratando de evitar el tema, que Joseph siempre sacaba.

—Oye- Se separo de mi. —Te tengo un regalo…

—No era necesario, Joseph…

—Shh, calla. –Rio. —Mira- Saco una cajita negra, y la abrió dejándome ver un hermoso brazalete de oro, con las letras “Forever”, sonreí enternecida me coloco el brazalete y lo abrace.

—Eres el mejor amigo, que me han podido mandar- Susurre cerrando los ojos, en realidad estaba muy agradecida con el, y en tan poco tiempo se había vuelto alguien muy importante para mi.

—Y tu eres la mejor amiga, que eh podido besar- Dijo y rio. Le di un leve golpe en el brazo, sin dejar de abrazarlo. Hasta que escuchamos como alguien se aclaraba la garganta detrás de nosotros. Me solté de inmediato al igual que el, para encontrarnos con la mirada de él.

— ¿Interrumpo algo?- Pregunto sarcástico.

—No- conteste inmediato.

—Si- contesto Joseph, mientras los dos se aniquilaban con la comida. Harry me tomo bruscamente de la muñeca y me estiro.

— ¡Oye cuidado!- Le grito Joseph.

— ¿A ti que te importa imbécil? ¡Por que mejor no te vas a buscarte una novia!- Contesto Harry, _____ revoloteo los ojos. Siempre las mismas peleas.

—Resulta que a la novia que quiero, es la que tienes tu- Le dijo Joseph empujándolo.

—Mira imbécil, veras que…

— ¡Joder, basta! ¡Siempre es lo mismo! ¡Yo, yo ya no puedo estar así!- Grite, haciendo que los presentes en la pequeña reunión, y sobre todo Harry y Joseph me miraran. —Llámenme cuando no quieran pelear. Ni si quiera, por que es mi cumpleaños- Alargo decepcionada.

—Nena, espera…

—No Harry, suéltame- Murmure, el lo hizo y salí de la casa que habíamos rentado Liam, Charlotte, Harry, Joseph y yo.

En realidad estaba cansada. Siempre eran las mismas peleas, y todas eran por mí. Sabía perfectamente que Joseph, quería algo más conmigo. En realidad todos lo sabían, incluso Harry. Pero el era mi mejor amigo, y yo lo apreciaba demasiado. Pero era algo que Harry no se dignaba a entender, me veía con Joseph y ya pensaba lo pero de mi. Le había dicho tantas veces que el era la única persona que me importaba y parecía no entender, empezaba a cansarme. Tantas peleas entre ellos, y de Harry y mías empezaban a agotarme.

Me subí arriba de mi auto y me senté en el techo de este, golpeando levemente los vidrios de este con mis talones. El aire fresco jugaba con mi cabello, lance suspiros. Varios, mientras pensaba en que era lo mejor. ¿Terminar con Harry? ¿Dejar de hablar con Joseph? ¿Alejarme de los dos? ¡No lo sabía! Solo era una chica que acababa de cumplir sus dieciocho años. La cual estaba estresada. El año pasado, desde que Harry y yo nos hicimos novios, había sido muy feliz, pero también muy triste. Su desconfianza me hería, y su presencia me hacía sentir de mil maneras. Karen, la rubia ex novia de Harry me había molestado de mil maneras, y este año, ni se dijese. Lo único bueno, era que era el último año que veía su cara operada. Eran pocos problemas, pero para mi eran los mas grandes. Sentía que cargaba con todo el mundo en mis hombros. Quizás no fueran muchos para otras personas, pero para mi lo eran todo. Y ahí estaba, mi jodida vida de adolescente. Mi vida, y mis problemas.

— ¡Hey, ______!- Suspire y entre cerré los ojos.

— ¿Qué pasa Harry?

—No quiero que mi nena se enoje en su cumpleaños- Se sentó junto a mí y me atrajo hacía su cuerpo. Por ende, recosté mi cabeza en su hombro. —Lo lamento ______- Beso mi frente. —Pero solo de pensar que podrías ser de otro, Dios me da una rabia.

Lo mire a los ojos, bese su barbilla y entrelace nuestras manos.

—Por Dios, Harry… Sabes que eres el único, y Joseph… Joseph es mi mejor amigo, nunca tendría nada con el.

—De ti lo creo, pero no de el.

—El hombre llega hasta donde la mujer quiere, y obviamente yo no le permitiré nada, conmigo- Lo mire fijamente a los ojos, me beso una mejilla.

—Feliz cumpleaños mi vida- Susurro, rozando nuestros labios.

—Gracias- Murmure.

—Mañana iré a tu casa, y te llevare a comprar algo, lo que desees.

—No quiero nada- Dije volviendo a rosar nuestros labios. —Oh, pensándolo bien… Si, quiero algo.

—Bien, mañana te lo compro.

—No- murmure, mirándolo. —Lo que quiero no se compra.

— ¿Entonces?- Me miro confundido.

—Hazme el amor, aquí… Y ahora.

Secret sexWhere stories live. Discover now