Moving to LA - Grayson Dolan

Capítulo 9

La luz del día me despertó. 

Me giré y vi que Grayson seguía dormido. Era adorable.

Me levanté y me quede sentada en la cama, junto a él. Estiré los brazos, para luego coger mi móvil. Desbloqueé la pantalla y vi que tenía miles de notificaciones. Esto era una locura, y ya podía imaginarme por que era...

Abrí instagram, y vi más de 1000 comentarios negativos, llamándome zorra, guarra, y que yo solo era un lío tonto para Grayson. Algunas decían que la foto era falsa, pero la mayoría estaban seguras de que yo estaba con Grayson.

Decidí ignorar todo eso. Me daba igual la opinión de los demás, me daban igual las críticas.

- Buenos días -oí una voz ronca que provenía de mi lado.

- Estás sexy incluso recién despertado -le dije sin filtro.

Se rió, me cogió de la cintura y me volvió a tumbar junto a él.

- Me gustaría quedarme así para siempre -dijo.

Noté mariposas en el estómago. 

Espera, ¿QUÉ? No. Retiro lo dicho. Yo nunca he sido cursi, ni lo pienso ser. Probablemente sería que la comida de el día anterior me había sentado mal.

Grayson se acercó a mi y me dio un suave beso. 

Me quedé observándolo, y con una mano le empecé a acariciar el pelo. Después fui bajando y le seguí acariciando la cara, y su mandíbula definida.

Mi móvil vibró y arruinó el momento.

Siguió vibrando varias veces más.

- ¿Quien es el pesado? -dijo Grayson refiriéndose al móvil.

- De echo... -cogí el móvil para ver que me habían enviado- son tus fans.

- ¿Qué? -dijo confundido- ¿Han vuelto a encontrar tu cuenta?

- Es que... -miré hacía otro lado- ayer subí una foto tuya.

- Vaya... -dijo.

- Pensé que no te importaría, si quieres la borro... -empecé a decir pero me interrumpió.

- Kels -me miró a los ojos- claro que no me importa. Si a ti te da igual darte a conocer, a mi también. No tengo miedo de lo que puedan pensar de nosotros. Yo estoy bien contigo, y no voy a dejar que la opinión de los demás arruine nuestra relación.

¿Relación? ¿Dijo relación? Mi corazón estaba apunto de salirse de mi pecho.

- Lo siento -dije honestamente-  no se porque lo hice.

- No te disculpes, no has hecho nada malo -dijo y me abrazó.

Olía tan bien.

- Gracias, supongo -dijo. 

- Lo he dicho en voz alta, ¿verdad? -dije sonrojándome.

- Hahaha -se rió de mi- me encantas -dijo y me revolvió el pelo.

- ¡Ei! -me quejé y le despeiné yo a él.

- ¡MI MALDITO PELO! ¡Es sagrado! Te vas a enterar -dijo y se tiró encima mío mientras me hacía cosquillas.

- ¡Para, para, para! -empecé a chillar mientras me reía sin parar- ¡Estás loco! 

No paraba.

- ¡AYUDA! -grité, y al cabo de unos segundos alguien abrió la puerta y Grayson paró de golpe.

- ¿Qué está pasando? -dijo un Ethan medio dormido, entrando a la habitación- ¿qué hace ella aquí? Son las ocho de la mañana.

- Se quedó a dormir -dijo Grayson y noté como Ethan se incomodaba.