Capitulo IV

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Una semana después.

Recibimos la llamada de Suarez corporation, aceptando nuestro proyectos.

Y aun mi vida personal seguía igual, no mejoraba ni empeoraba. Y busque mi disfraz y me vestí de Georgina. Y muy temprano salimos al encuentro y para mi sorpresa ahí solo estaba Eduardo.

Y al principio solo me observaba y pensé que, me había descubierto y sin embargo mantuve la calma y entre trabajo y mas trabajo nos quedamos solos, bueno casi solos aun estaba ahí la secretaria y bueno ya era tarde, salí por un café, dure alrededor de 15 minutos y me encuentro a la secretaria de ofrecida, respire hondo y solo dije:
-valla! y la ética profesional. Con un gran deseo de sacarles los ojos, pero no podía destruir todo por un impulso.
y luego dije:
-permiso señores no quiero interrumpir  mas.
Eduardo articulo:
-no es lo que usted cree. Espere.
- no licenciado yo no creo nada excepto lo que veo... Y bueno!!!
-crea me, por favor yo soy un caballero .
A lo que Nancy la secretaria altaneramente dijo:
-Disculpen ya he acabado de hacer mi trabajo, con permiso.

Eduardo se puso una mano en el rostro y me miraba con deseos de que la tierra se abriera y lo tragara.

Y dije:
- creo que yo tampoco tengo nada mas que hacer aquí.

Subí al auto, sentía que en cualquier momento iba a explotar, con tan solo ver su  altanería,  como su poca ética y falta de conciencia  hacían que se me subiera la sangre y no podía respirar solo pensé en buscarla aun no importaría rebajar me, pero una mujer sabia edifica su casa, y aun seguía ahí ni siquiera había encendido el carro, habían pasado 5 minutos y aun estaba furiosa, indignada, hasta humillada, y arrepentida de no ha ver  le enseñado  a respetar los hombres ajenos y en busca de tranquilizar me , recoste   mi cabeza del asiento y ahí fije mis ojos al frente y ví a  mi esposo, que se marchaba . Y no lo pensé dos veces encendí el auto, y me marche.

Y por primera vez en mucho tiempo mi esposo llegó a casa primero que yo, es que por mas relevante que fuera mi afán por llegar a casa  no podía llegar en el carro de la que supuestamente es Georgina Montilla y lo lleve a uno de los  apartamentos de Martha donde allí sus paredes escondían mi secreto , en pocas palabras ahí vivía mi otra yo, todas sus prendas de vestir estaban a ahí.

Busque mi carro y me marche a casa, y le encontré durmiendo en la habitación de huésped, subí los escalones despacio, me duche y entre mis sabanas descanse.

Esa noche soñé  que estaba en la oficina y le di clases de moral a Nancy... Resultaron tan amenas  que hasta aprendió la lección de manera eficaz,  solo que el libro pedagógico le  enseño con unos  que otros rasguños en su ignorante e intransigente y trivial rostro.

En la mañana del domingo , me desperté como si, se me había adherido a las sabanas, no tenia ningún deseo de soltarlas ,pero me levante por que era domingo iría a buscar a mi pequeño a casa de mi madre.
Fui a la cocina a preparar  el desayuno y cuando veo están los dos hombres de la casa viendo la tv, y Edurdito al verme me abrazo y me lleno de besos.
Y mi esposo dijo.
-Buenos días cariño. Ya he preparado el desayuno.
Solo lo mire y la  expresión de mi rostro tubo  un sentir desconcertante.

Me llevo hasta la cocina y me dijo.
-Helen se que he fallado. Te he fallado como hombre y como esposo, pero estoy dispuesto arreglar todo esto.
Ya no sabia que pensar, solo dije.
-Seguro ?Eduardo....
No dijo ni una sola palabra solo me beso.
Y  creí en el momento que le tendría que decir  adiós a mi otra yo...pensé que todo estaba bien...que ya todo había acabado...pero no... Y no voy a mentir el efímero cuento feliz llego a su fin  en ese preciso instante sonó su celular. Y aun sus labios tocaban los mios.

El agarro su celular le contesto, era Nancy y con el mismo ritmo subí a mi habitación y 6 minutos después apresuradamente el subió y toco mi puerta.
-Helen... Cariño habré  por favor, hablemos.
- Eduardo si aun te queda algo de pudor vete...
- Deja me  explicarte.
Abrí la puerta.
Que me vas a explicar, que tu amante te llama y le respondes delante de mi.
-deja de sacar ideas....ella no es mi amante.
-Es una mujer suela, barata.
-Helen... Basta.
-Que?ahhh no quieres que hablen mal de ella.
- No he dicho eso.
- me importa muy poco lo  que sea o no...vete de mi vista...tu y ella desaparezcan.
Y estaba tan molesta que le cerré la puerta en la cara, y el seguía ahí .
-Helen le prometí a Eduart que iríamos hoy al campo de béisbol. Como lo que creo que somos una familia. Sin embargo ahora tengo mis dudas.

En cada guerra hay un ultimo movimiento que es el que se destaca al proporcionar el ultimo golpe para derrocar al oponente. En una discusión siempre hay una palabra clave que duele mas que cualquier otra y esa dolió sentí  mil espadas rotos por todo mi cuerpo.

Media hora después. Eduardito me llama.
-mami ya estas lista? Pronto nos iremos veremos el juego. Mami vámonos ya quiero estar allá.
Le dije amor ya voy aun no estoy lista da me un momento.

Cuando uno es madre debe poner sus intereses en segundo términos.

Y nos fuimos al campo de béisbol durante el camino no hablamos ni una sola palabra.

Ya eran las doce del día y ahí estábamos...Eduardo pidió algo de comer y fuimos a comprar le, y cuando regresamos vimos como llegaba Nancy.
Inmediato dije que hace ella  aquí .? Responde.
El dijo no lo se.
Ella se acerco y dijo.
-Buenas tardes, licenciado ,Helen como estas?
Respondí.
-hace un momento estaba bien pero aparecieron las zorras y su perfume barato molesta.
Me miro. Y obvio mi comentario y dijo.
- Licenciado se a presentado un proyecto hay que revisarlo que mañana va con estadía a los Ángeles... Y se necesita su firma para exportarlo. Ya que el señor Suarez se ha ido a Nueva York, en las horas de esta mañana.

Eduardo me miro y dije.
-Le prometiste a tu hijo que estarías hoy aquí.
-cariño es una emergencia . Todo estará bien. Regresaré pronto,
- Si te vas , te olvidas de mi.
-No confías en mi ?
- Ni en ti.. Ni en esa poca mujer.
Nancy exclamó.
-disculpe?
- Además de barata y ofrecida también es sorda.
- solo  hago mi trabajo. No tengo por que escuchar a esta insolente que  dice llamar ser una dama, usted no se merece aun hombre de verdad como a Eduardo. No es mi culpa que ustedes estén mal, si Helen  lo se, su matrimonio se extinguió y no lo culpo,con un espanto de esposa hasta yo abandono el barco.

En ese instante le di una cachetada hasta el resfreco le hache enzima Eduardo me agarro y ella se marcho.
Y  Eduardo dijo.
-tranquiliza te, Helen por Dios, no esperaba eso de ti. Que te pasa? Mi esposa no se hubiera comportado así.
-sabes que estoy harta de esto vete con ella...vete de una vez por toda...pero yo también me iré, ya no soy suficiente para ti.
Fui por Eduart y me marche a la casa.

Pase el resto de la tarde en casa de mis padres y luego me retire.

La Amante de mi EsposoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora